A través de una presentación del director del Hospital de Niños, por indicación del gobierno de De la Sota, la justicia imputó a 5 delegados (de varios gremios) del Hospital de Niños por una medida de fuerza desarrollada hace unos meses. El director hizo una presentación falseando los hechos para que sean acusados de impedir el funcionamiento del hospital.

Se trata de un nuevo intento del gobierno de avanzar en la criminalización de las luchas sindicales y sobre todo de las de los trabajadores de la salud. El primer intento lo hizo con un proyecto para limitar las medidas de fuerza en los “servicios esenciales”, fracasó. Ahora trata a través de un nuevo “código de convivencia” limitar las manifestaciones y movilizaciones. Tampoco pudo aprobarlo aún.

La destrucción de la salud pública ha colocado a los hospitales de la provincia en una situación de luchas casi permanentes desde hace dos años. A los bajos salarios, la crónica falta de personal, se suman la falta de insumos, el deterioro de las instalaciones y la tercerización de servicios.

Hace un par de meses trabajadores del Hospital Misericordia fueron salvajemente agredidos por un patota del Sindicato de Empleados Públicos (dirigido por el delasotista Pihén) cuando fueron a reclamar contra la aceptación de un bono miserable que le gremio acordó con el gobierno. Resultado de ellos cuatro activistas y delegados del hospital están procesados.

Los trabajadores del Hospital de Niños ya han comenzado con asambleas contra las imputaciones. Se prepara una gran lucha por el desprocesamiento y en defensa de la salud pública.