El miércoles pasado en el Barrio San Alberto de Córdoba la Policía detuvo de forma violentísima y sin razón a un joven de 16 años. Además, golpearon a varias mujeres, entre ellas a la madre del chico y a la novia, quien también es menor de edad. Paula Pacheco, la madre del adolescente, afirmó: “Lo que están haciendo con mi hijo es racismo y clasismo”.

El hecho ocurrió al mediodía, cuando la policía interceptó en la calle al chico que estaba con su novia y lo revisaron. A pesar de constatar que no tenía drogas ni armas lo quisieron detener y él se resistió. Luego de esto, la policía ingresó por los techos a la casa de la novia y allí golpearon a las mujeres que querían evitar que se lo llevaran. Finalmente lo detuvieron.

Paula estuvo todo el día recorriendo Comisarías y Tribunales sin que nadie le diera información sobre el paradero de su hijo. Recién a las 6:00 del día siguiente logró ubicarlo en el Hospital Príncipe de Asturías. El chico fue llevado allí luego de quedar inconsciente, producto de la brutal golpiza que le dieron entre cuatro policías luego de detenerlo.

Después de lo sucedido, Paula denuncia además que la Policía está tratando de culpar a su hijo por un delito que no cometió. Estarían buscando falsos testigos que declaren que el joven amenazó con un arma a unos trabajadores de la zona. Ella asegura que todo el tiempo hostigan al chico y lo quieren detener “solo porque le tienen bronca”.

Cuando la hermana de Paula se acercó a la Comisaría a preguntar por qué detuvieron al chico, le respondieron que se lo llevaron por “negro”. El hecho quedó asentado en la Central de Policía y el lunes la madre de la víctima va a realizar la correspondiente denuncia. Este es solo un episodio más que demuestra la estigmatización y el ensañamiento de las fuerzas policiales con los jóvenes de los barrios.

En ese sentido, es necesario continuar la organización y la movilización contra la represión e impunidad policial. En esa perspectiva, la convocatoria a un plenario nacional antirrepresivo resulta clave.

Es necesario el desmantelamiento de todo el aparato represivo descompuesto. Basta de persecución y hostigamiento a lxs pibes de los sectores populares. El Estado y los gobiernos son responsable de la violencia policial.