El juicio por el crimen de Paulina Lebbos y la lucha contra la impunidad

Durante dos días declaró Alberto Lebbos como primer testigo en el juicio oral por el crimen de su hija Paulina, ocurrido 12 años atrás. 


En el banquillo, acusados por encubrimiento agravado, se encuentran ex altos funcionarios del Ministerio de Seguridad y de la policía provincial del gobierno de Alperovich, como Eduardo Di  Lella, ex secretario de Seguridad; Hugo Sánchez, ex jefe de Policía; Nicolás Barrera, ex subjefe de Policía; Héctor Brito, ex jefe de la Unidad Regional Norte y Hugo Rodríguez, ex policía. Todos ellos, a pesar de estar comprometidos en la causa, continuaron en funciones e incluso fueron ascendidos, es decir fueron protegidos por el gobierno.Roberto Luis Gómez, quien puso su chip en el celular de Paulina el día que desapareció, está acusado de privación ilegítima de la libertad seguida de muerte.


Por el caso Paulina ya hubo otro juicio en el que fueron condenados por encubrimiento ex oficiales de policía de la zona donde se encontró el cuerpo. Los fallos se encuentran apelados. Además hay otro proceso judicial, paralelo, contra el exfiscal Albaca, por una decena de delitos y también próximamente va a juicio oral. 


En su declaración, Lebbos denunció diversas maniobras dirigidas a encubrir el crimen y declaró que pretende avanzar no solo en el enjuiciamiento de los autores de las acciones de encubrimiento sino también a sus autores ideológicos, señalando a ex gobernador y actual senador nacional, José Alperovich, y a su esposa, presidenta del PJ provincial, y al ex ministro de gobierno de Alperovich y actual ministro fiscal, Edmundo Jiménez. También denunció a otros funcionarios, que en el actual juicio están en la lista de testigos, pero que podrían pasar a ser imputados y procesados, como son los casos de los ex ministros de seguridad López Herrera o Baillo y otros altos funcionarios y los hijos de Alperovich y el hijo de quien era el jefe de la seguridad personal de Alperovich, Kaleñuk, e incluso al propio Alperovich.


El 26, por una nueva jornada de lucha contra la impunidad


El 26 de febrero se cumplen 12 años del crimen y, como todos los años, se materializa con una gran jornada de lucha contra la impunidad.


En esta oportunidad va a tener como telón de fondo el desarrollo del juicio, pero también de toda una acción del gobierno macrista, que desde el Ministerio de Justicia de la Nación están interviniendo con veedores sobre más de 30 causas judiciales, entre ellas la de Paulina, y la acción de la municipalidad de la capital, gobernada por una fracción del PJ enrolada en Cambiemos y poblada de funcionarios de Libres del Sur. 


Cuando ocurrió el crimen de Paulina, varios de estos integraban el gobierno de Alperovich y fueron convencionales en la Convención Constituyente, donde se opusieron a que se formara una comisión investigadora independiente y le dieron la espalda a todas las convocatorias de movilización hasta hace muy poco tiempo.


Es decir que este aniversario estará cruzado por este operativo del macrismo apuntado a cooptar a la Comisión de Familiares. Lebbos en su testimonio reivindico la lucha y a la Comisión de Familiares y en numerosas oportunidades reivindico la independencia de todos los gobierno de la Comisión. Así debe ser y de la misma manera la jornada del 26, un acto como lo fue siempre de lucha contra la impunidad de hoy y de ayer, contra la impunidad que reina en Tucumán y en todo el país. La lucha contra la impunidad de los crímenes de Estado, de la policía y de sus funcionarios es incompatible con el gobierno de los asesinatos de Santiago Maldonado y Rafael Nahuel y de la ´doctrina Chocobar´.


Justicia por Paulina y por todas las víctimas de la impunidad.