Familiares y vecinos de Morena reclaman justicia frente a la Municipalidad de Lanús

Conmovedora presencia de compañeros de la escuela primaria donde acudía la niña de once años. Bronca con la policía y el gobierno local.

Foto: corresponsal.

Familiares de Morena Domínguez, la niña de 11 años que murió tras un asalto cuando se dirigía al colegio en el barrio lanusense de Villa Diamante, movilizaron para exigir justicia por el crimen. Los acompañan cientos de vecinos y compañeros de la escuela de Morena, en una concentración frente a la Municipalidad de Lanús en que se expresa un fuerte cuestionamiento a las responsabilidades políticas por el accionar impune del bandas delictivas en la zona.

Sobre la Avenida Hipólito Yrigoyen, frente a la sede del gobierno municipal, se congregaron pasado el mediodía para reclamar el esclarecimiento del hecho y respuestas ante los cotidianos episodios de inseguridad que sufren los vecinos de Lanús. En la manifestación realizaron una conmovedora sentada alumnos de la escuela primaria levantando carteles con la consigna “Justicia por Morena”.

En el corte de expresó la bronca de la población del distrito ante la inacción policial, lo cual atestigua que padecen una verdadera zona liberada para el delito. Además del repudio a la policía Bonaerense, que ya se había notado el mismo miércoles 9 de agosto por la tarde cuando se congregaron ante la Comisaría Quinta de Lanús, en esta ocasión se hizo sentir el hartazgo para con la ausencia de respuestas del gobierno municipal. Funcionarios de la intendencia fueron increpados pidiendo explicaciones no solo para la familia de Morena sino a todos los lanusenses, que sufren cotidianamente este flagelo. La única respuesta que recibió la familia por parte del municipio es que la causa ahora se tramita en la Justicia.

El aberrante crimen de Morena Domínguez expuso una situación intolerable que viven los habitantes de Villa Diamante, donde el delito es moneda corriente en un barrio con carencias de urbanización y servicios, donde vive una población víctima además de la pobreza, la desocupación y el trabajo precario. Los vecinos denuncian que la salita de salud ubicada en las cercanías donde fue atacada Morena carece de insumos y que las enfermeras se desesperaban por no poder ayudarla. El móvil policial y ambulancia demoraron aquel día más de media hora, un factor determinante en el desenlace fatal.

La bronca popular y de los familiares y amigos de Morena está fundada en que los pedidos por mayor seguridad son sistemáticamente ignorados. Finalmente, la policía y los gobiernos son en realidad cómplices de las redes del crimen organizado. Como se autoincriminó el intendente en funciones Diego Kravetz, mano derecha de Néstor Grindetti (precandidato a gobernador en la lista de Patricia Bullrich), ellos saben dónde y cómo operan los búnker narco. Se valen de la pudredumbre criminal de la maldita policía Bonaerense, que actúa bajo las órdenes de Sergio Berni y Axel Kicillof. En un distrito donde no falta el hostigamiento policial hacia la juventud de los barrios, el delito actúa a plena luz del día.

Toda la solidaridad con los familiares y amigos de Morena. Basta de zonas liberadas.

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