Libertades democráticas
23/3/2018
Gordillo-Gerardo Martínez, construyendo impunidad
A 42 años del último y más sangriento golpe militar, la impunidad para quienes sembraron el terror durante ese proceso sigue vigente. Mientras tanto, el gobierno nacional ensaya una restauración política de las Fuerzas Armadas negando que hayan sido 30.000 los desaparecidos e intentando imponer la liberación de los genocidas por medio del beneficio de la prisión domiciliaria a criminales de lesa humanidad como es el caso del Coronel Roberto Gordillo, procesado en 2014 y condenado a perpetua por su comprobada participación en la desaparición y tortura de personas en Tucumán durante el Operativo Independencia, llevado a cabo en el año 1975 y que le valiera la felicitación y reconocimiento del gobierno de facto del '76 por su destacada función como "interrogador".
Gordillo fue miembro del conocidísimo Batallón 601 de Inteligencia y el reclutador oficial de Gerardo Martínez (hoy secretario general de la Uocra) en ese regimiento de espías bajo el nombre de Gabriel Mansilla, cuya función fue la de infiltrarse en las reuniones de los trabajadores de la construcción para señalar a los activistas que luego serían secuestrados.
Entrada la democracia, Martínez haría una próspera carrera sindical pero sin olvidarse de su "padrino político" que hasta poco antes de su detención en 2014 cobraría una mensualidad por parte de la Uocra de $25.000 (Infobae, 8/1/2018).
No es difícil entender, así, el actual grado de descomposición de la dirección de la Uocra y el entrelazamiento con las patronales y el Estado (este último, garante de la impunidad de Gerardo "601" Martínez), o las cientos de muertes evitables que se suceden año a año por impericia de las patronales que anteponen el lucro a la integridad de los trabajadores como los casos recientes de Santa Teresita y Mar Chiquita. Es por eso que hoy el Sitraic interviene desarrollando una fuerte campaña contra el trabajo en negro e impulsando un protocolo de seguridad en todas las obras para defender los derechos y la seguridad de los obreros de la construcción que hoy se encuentran en total estado de indefensión.
A poco de cumplirse un nuevo aniversario del golpe genocida del '76 desde el Sitraic repudiamos la domiciliaria otorgada a Gordillo y el intento de indulto al genocida Alfredo Astíz, entre otros, y más que nunca nos pronunciamos contra la represión de ayer y hoy.
Fueron 30 mil, fue genocidio.
Fuera los represores y las patotas de las organizaciones obreras.
Cárcel común a Gordillo, Martínez y todos los genocidas.
Contra el ajuste y la represión de Macri y los gobernadores.