Involucran a funcionarios de Transporte y a la gente de Pedraza

Belgrano Cargas

La Cámara Federal de Casación Penal rechazó la queja de Carlo Luigi Cappelli, presidente de la empresa Soesa, que administraba el ferrocarril Belgrano Cargas, quien pretendía lograr una revisión en esa instancia del procesamiento sin prisión preventiva dictado en su contra por el juez federal Claudio Bonadio, que fue ratificado en diciembre pasado por la sala I de la Cámara Federal.

La causa quedó en condiciones de ser enviada a juicio oral y es una muestra más de quénes son los responsables del descalabro ferroviario, donde queda al desnudo la vinculación de funcionarios y sindicalistas.

Carlo Cappelli fue procesado junto con Jaime, Angel Stafforini (hombre de Pedraza, procesado con él en la causa que investiga la coima a los jueces de la Cámara de Casación Penal en el caso de Mariano Ferreyra), el ex titular de la Comisión Nacional de Regulación del Transporte, Pedro Ochoa Romero -uno de los imputados que está siendo juzgado por la Masacre de Once- y Graciela Coria -esposa de José Pedraza- todos acusados por “defraudación por administración fraudulenta cometida en perjuicio de la administración pública”, con un embargo de tres millones de pesos, todo confirmado por la Cámara Federal.

En la causa también estuvo imputado Pedraza, pero se le dictó la falta de mérito meses atrás.

En ella se investigó el pago por parte del Estado Nacional de más de dos millones de pesos en sobreprecios para el tendido de vías del Belgrano Cargas, tras una gestión que habría realizado Jaime por escrito.


Claudia Ferrero (Apel)