El tribunal federal N° 5 fijó para el 23 de febrero de 2015 como fecha de inicio de los alegatos.

De este modo, la “megacausa” Esma III entra en etapa de definiciones.

Sesenta y siete genocidas están siendo juzgados por los casos de casi ochocientos compañeros que estuvieron cautivos en la Escuela de Mecánica de la Armada entre los años 1976-1983. Los represores enfrentan cargos por desaparición forzada, homicidio, violaciones, apropiación de niños y varios más. En el banquillo de los acusados se encuentran Jorge Acosta, Alfredo Astiz, Ricardo Cavallo y Juan Carlos Rolón, entre otros.

Se trata del juicio más significativo de los realizados hasta ahora, por cantidad de víctimas y de imputados. Apel representa a la querella unificada de Justicia Ya! Buenos Aires, un colectivo de organismos de derechos humanos integrado por la Asociación Ex Detenidos Desaparecidos, AGD-UBA, Asociación Anahí y Patricia Walsh, entre otras organizaciones y familiares.

El juicio comenzó el 28 de noviembre de 2012. Un tercio de los acusados goza del beneficio de la prisión domiciliara. Nuestra querella pidió que fueran revocadas. Dos años después, el tribunal todavía no se expidió al respecto.

En este debate están siendo juzgados por primera vez los llamados “vuelos de la muerte”, denunciados en los años '90 a partir de la confesión de Adolfo Scilingo, y los vejámenes y aberraciones cometidos en “La Isla”, un refugio en el Tigre entregado por la curia a los represores. Allí fueron ocultados los cautivos de Esma durante la visita de la comisión de derechos humanos de la OEA, en 1979.

Al menos siete compañeros de Política Obrera pasaron por la Esma durante el año 1977. Laura Dabas de Correa, Juan José Cuello y Susana Granica, liberados en septiembre de ese año. Permanecen desaparecidos Fernando Sánchez, Marcelo Arias, Gustavo Grassi (“Mondragón”) y “Gogó” Russo. Nuestro compañero Néstor Correa, ex preso político y actual secretario de Derechos Humanos de la AGD-UBA, declaró por el caso de su compañera, Laura Dabas.

No obstante las condenas a las que arribe finalmente el tribunal, la causa Esma no habrá concluido. Quedarán varios tramos por delante: la causa de los curas palotinos y los nuevos casos ventilados en el curso de las audiencias. Entre ellos, el de cuatro militantes de Política Obrera. Muchos de los genocidas que fueron dueños de la vida y la muerte en Esma aún no han sido juzgados. La Justicia, mezquina y lenta, garantiza la impunidad.

En nuestro alegato, programado para el 11 de marzo de 2015, reclamaremos se condene por genocidio a los 67 genocidas por los 800 casos, y solicitaremos que se extraigan los testimonios pertinentes para continuar con el juicio y castigo por las desapariciones de los compañeros de Política Obrera y los 5.000 compañeros detenidos-desaparecidos de la Esma.