El martes 23, alrededor de las 19 hs, Cristian Leonardo Rojas salió de su casa en el Bajo Flores. Cuando caminaba por la calle Corea lo paró un móvil de Gendarmería y lo llevó detenido sin motivos. Los familiares, al enterarse de la detención, fueron al puesto de la fuerza que se encuentra apostado en Cobo y Curapaligue. Allí, los oficiales le dijeron a los padres que Cristian estaba en la Comisaría 38°, pero cuando llegaron al lugar para averiguar el paradero del joven de 25 años les informaron que no se encontraba allí. Cristian había sido trasladado ilegalmente al barrio vecino de Lugano y en un descampado le habían dado una golpiza terrible, incluidos dos puntazos en la zona del abdomen. Durante la detención ilegal los gendarmes amenazaron de muerte a Cristian, diciéndole que lo iban a tirar al Riachuelo. Cristian fue tirado finalmente sobre la Avenida Cruz, cerca del Jumbo, desde donde volvió gracias a la ayuda de los vecinos.

 

Los familiares han realizado la denuncia en la Comisaría 38° y se ha dado intervención a la Fiscalía Criminal y Contravencional Nro 43 a cargo del Fiscal Dr. Velarde.

 

La situación que vivió Cristian no es aislada, permanentemente la Gendarmería (fuerza involucrada en la desaparición de Santiago Maldonado) detiene a chicos que van o vuelven del secundario, los requisan, les apuntan con armas de fuego y hasta incluso les roban sus pertenencias. Es una política  sistemática de meter miedo y tener a raya a la juventud. Los antecedentes de gatillo fácil en los barrios pobres de la capital revelan una zona liberada por los gobiernos para que las diferentes fuerzas actúen con impunidad contra la juventud. El Polo Obrero y el Partido Obrero acompañarán a Cristian y los familiares en el reclamo por el esclarecimiento de los hechos y el castigo a los responsables.