La Rioja: Provocación del gobierno pro-minero

Extraordinaria reacción popular

La Rioja

El sábado 11 de mayo, el gobernador Beder Herrera tenía planificado asistir a la asunción de las autoridades del PJ de Famatina. Para la ceremonia, organizaron un acto en la plaza del pueblo. Previo a ello, militarizaron el lugar, desplegando la infantería de la policía, los grupos especiales y policía de civil. Los únicos que se arrimaron al acto fueron algunos punteros y personas de otras localidades. No llegaron a cien personas. Los mil chorizos puestos en la parrilla se terminaron quemando. Pero el acto terminó completamente devaluado cuando el gobernador avisó que no iba a concurrir. Entonces, punteros y policías de civil salieron a hostigar a los pobladores concentrados en las cercanías para dar paso a una represión de gases, golpes y balas de gomas que hirieron a varios vecinos. Cinco de ellos fueron detenidos e incomunicados. Se cortó Internet, para evitar que la información de la represión tomara estado público nacional. Pero no lo lograron: se propagó la denuncia y el reclamo del cese de la represión y liberación de los detenidos. En Famatina, a pesar del hostigamiento de las fuerzas represivas, los vecinos se movilizaron y sitiaron la comisaría con tractores y maquinarias de la municipalidad: nadie iba a salir de la comisaría si no se liberaba a los detenidos. Los sitiadores terminaron sitiados.


La movilización fue inmediata también en Chilecito (lugar donde fueron trasladados los detenidos) y en la capital de la provincia, lo que obligó a que fueran liberados esa misma noche.


Con los compañeros en libertad, la Asamblea de Famatina votó reclamar, junto a la Asamblea de Chilecito y la Asamblea La Rioja capital, el juicio político al ministro de Gobierno, Felipe Alvarez, y al gobernador Beder Herrera. El reclamo se presentó ante la Cámara de Diputados de la provincia el lunes 13.


Significado


La provocación represiva no fue el exceso de algún jefe policial, sino el intento del gobierno de explotar un clima de cierta distensión en la lucha popular antiminera para marcar la cancha e intimidar a los pueblos de Famatina y de Chilecito, en vísperas de un nuevo aniversario de la fundación de La Rioja y cuando se estaba preparando una movilización provincial organizada por las asambleas ciudadanas de varios pueblos. A la provocación bederista, le salió el tiro por la culata. Se ha reforzado el impulso en favor de una movilización masiva. El rechazo a las multinacionales mineras y los políticos como el gobernador, quienes actúan como sus agentes, es total en Famatina, Chilecito y en la capital -o sea en la mayor parte de la provincia. Hoy más que nunca, "el Famatina no se toca". Fuera Beder y todo su gobierno entreguista y represor.