Lanús: nuevos casos de represión policial a la juventud


En los últimos días han recrudecido las prácticas arbitrarias contra la juventud de la localidad de Villa Jardín, en el partido bonaerense de Lanús, por parte del personal policial de la Comisaria 5ª de Lanús.


 


Se trata de la misma comisaría que meses atrás había cobrado notoriedad con la intromisión ilegal con balazos de goma, golpes, y gas pimienta en el comedor “Los cartoneritos” donde decenas de niños retiraban su comida, y que tuvo como saldo varios menores intoxicados y golpeados, y la pérdida del embarazo de una de las compañeras que asistía a comer allí.


 


En los primeros días de julio, un obrero de la construcción fue increpado por la policía en una de sus habituales ‘requisas’ en las cercanías de su vivienda; el joven fue detenido durante largas horas sin motivo alguno y recibió una golpiza.


 


Unos días después, el domingo 9 de julio, cuatro jóvenes fueron detenidos por el supuesto robo de un auto (una causa que se demostró armada por la policía) y sin estar procesados fueron mantenidos en la comisaria durante cinco días sin ningún tipo de pruebas que los incriminen. Esta arbitrariedad desató la movilización de los vecinos a la comisaría y luego al juzgado donde se realizó la denuncia, lográndose así la liberación de los detenidos.


 


Las requisas en los barrios o razzias en los colectivos, que se han vuelto cada vez más habituales, no son una salida frente al problema de la inseguridad, el narcotráfico, las redes trata y las mafias del crimen. Por el contrario, con estas acciones las fuerzas policiales y el gobierno de Vidal montan una pantalla de supuesta “lucha contra la inseguridad”, sin tocar los intereses del crimen organizado, que cuenta con las mismas fuerzas policiales y los funcionarios políticos como sus cómplices.


 


A su turno, estos hechos de abuso policial –que están sucediendo en varios distritos de la provincia– buscan amedrentar a los trabajadores y la juventud para impedir una reacción ante el ajuste, que en los barrios tiene un correlato en la falta de trabajo y en la miseria creciente.


 


Se impone la necesidad de abrir un proceso de organización y deliberación en el barrio para hacer frente a la avanzada represiva por parte de la policía; por la separación de todos los responsables de las arbitrariedades, empezando por el comisario de la 5ª. La campaña que la UJS-Partido Obrero viene desarrollando contra estos aprestos, será un aporte a la pelea por estos objetivos.