El gobierno “de los derechos humanos y el diálogo” mantiene presos desde hace tres meses a tres trabajadores desocupados de Las Heras: Blanco, García y Hernández.

Estos tres jóvenes privados de su libertad fueron integrantes, como tantos otros, del movimiento social que reclamó fuentes trabajo en Las Heras a mediados del año pasado, reclamo que debería solucionarse naturalmente desde el Estado.

Recientemente, luego de insistir casi dos meses, el juez Quelín aceptó tomar declaración a los testigos aportados por la defensa. Aunque el intendente Camino y el subsecretario del Interior del gobierno provincial aseguraron que no hubo presión y amenazas al firmar las actas, Quelín sostiene los cargos de coacción agravada, lo que implica la imposibilidad de excarcelar a los compañeros.

Desde el FUT-Partido Obrero, hacemos un llamado a todas las organizaciones políticas, sociales, gremiales, estudiantiles, de derechos humanos, artistas e intelectuales del orden nacional para reclamar que se libere inmediatamente a Blanco, García y Hernández. Exigimos que el Consejo de la Magistratura inicie inmediatamente el enjuiciamiento del juez Quelín por ser un instrumento de la política represiva aplicada en toda la provincia.

Entretanto, la situación de los compañeros Blanco, García y Hernández se ha agravado. Después de varios días de huelga de hambre, de la que luego desistieron, el encierro se ha vuelto más cruel: sin salidas de ningún tipo al aire libre, con comida insuficiente y de mala calidad.

Llevamos el reclamo a la Cámara

Como parte de esta campaña, un grupo de militantes del FUT-PO nos presentamos en la Cámara de Diputados y en una de las tribunas levantamos pancartas que mantuvimos en medio de una gran tensión y en absoluto silencio de nuestra parte durante 40 minutos, mientras el diputado Biloni fundamentaba las ventajas de entregar el petróleo a la multinacional OXI.

Finalizado su discurso, pide la palabra el diputado radical Cruz, quien saluda a los militantes del PO por la campaña por la libertad de los presos. El presidente de la sesión y varios diputados oficialistas se salieron de quicio y le reclamaron que se estaba saliendo del temario. Miguel del Plá se dirigió en ese momento al presidente Martínez Crespo, manifestándole que si ellos habían podido saludar hacía minutos la presencia de dos intendentes en la sala, ¿por qué se habría de prohibir a Cruz que saludara la del PO?

Inmediatamente, el presidente exigió a la custodia que se retire a “esa persona que había hablado”, lo que varios guardias realizaron al instante. Esos mismos guardias nos habían estado hostigando durante todo el tiempo en que sacamos los carteles en silencio. Al día siguiente, tres de los cuatro diarios de tirada local informaron del incidente.

Ahora vamos por miles de firmas, a formar comisiones de solidaridad en cada pueblo de la provincia y a reclamar que el conjunto de los gremios asuman organizadamente la defensa de los compañeros presos.