Libertad para José Luis, detenido por un delito inexistente

Acusado de tenencia de hojas de coca, lo cual está expresamente permitido.

José Luis Zurita Delgadillo es un joven argentino de 28 años, hijo de bolivianos, que se encuentra sufriendo privación ilegal de la libertad desde el 25 de agosto pasado. Fue incriminado por un delito que la propia ley excluye y está detenido en la cárcel federal de máxima seguridad de Marcos Paz imputado por tenencia de hojas de coca.


José Luis es estudiante universitario y cursa el tercer año de la carrera de Ingeniería Civil en la Universidad Nacional de La Plata, no tiene antecedentes penales y ayuda, junto a sus 3 hermanas, a sostener a la familia trabajando junto a sus padres en una feria en la ciudad de La Plata.


En vísperas de las festividades bolivianas, acompañó a su madre a comprar hojas de coca a fines de compartirla en la feria y las celebraciones como comúnmente se acostumbra. Al salir fue detenido por la policía y al día de la fecha le niegan la excarcelación; días atrás le dictaron prisión preventiva por un delito inexistente.


La hoja de coca forma parte de la cultura milenaria de los Pueblos andinos, la Ley 23.737 en su art. 15 autoriza “la tenencia de hojas de coca en su estado natural, destinado a la práctica del coqueo o a su empleo como infusión, no será considerada tenencia de estupefacientes”.


La Constitución reconoce los derechos culturales, promovidos para garantizar que las personas y comunidades tengan acceso a la cultura y puedan participar en aquella que sea de su elección. El consumo de la hoja de coca es parte de la identidad cultural de los pueblos andinos, no solo de Bolivia sino también de la Argentina. Criminalizarla, sin lugar a dudas, es atentar contra ese derecho.


En nombre de la lucha contra el narcotráfico y con las políticas que atentan contra los derechos del colectivo migrante, estigmatizan y criminalizan a los extranjeros de países vecinos y la detención ilegal de José Luis es una muestra de ello.


Las fuerzas policiales son las principales responsables de la proliferación de la inseguridad que se vive en los barrios populares y son cómplices y garantes del narcotráfico, el juego clandestino, los robos y las redes de trata que crecen gracias al respaldo del aparato policial que libera las zonas y garantiza el crimen organizado. Este aparato desacreditado es el que quieren relegitimar para que sirva de soporte del plan de ajuste contra las masas.


Los migrantes y trabajadores precarizados, la juventud y los militantes populares somos quienes estamos en la mira de las fuerzas represivas, que están bajo mando de los gobiernos del ajuste y que cuentan con la complicidad de la Justicia.


Exigimos la inmediata libertad de José Luis y su desprocesamiento.


Unidad de los trabajadores migrantes y argentinos contra el ajuste y la represión del macrismo y todos sus cómplices.


Basta de persecución y abuso policial.


Desmantelamiento de todo el aparato represivo que se encuentra en el centro de la organización delictiva.