“Lolo” Regueiro fue asesinado por una represión policial

Ni incidentes ni descompensación, ni hecho aislado

"Lolo" Regueiro, el hincha de Gimnasia fallecido

La represión desencadenada por la Policía Bonaerense contra los hinchas de Gimnasia y Esgrima de La Plata el jueves 6 de octubre, no ha podido ser defendida por los funcionarios del gobierno.

Aunque en las primeras horas, el ministro de Seguridad, Sergio Berni, ensayó sus consabidas defensas de la actuación policial, el peso de las imágenes y el repudio fue obligando a adoptar un tono más crítico, intentando achicar el daño y entregando algunos mandos medios. Tres policías fueron pasados a disponibilidad y arrestados.

Las versiones oficiales, repetidas por los medios de comunicación, habían sido desmentidas una por una.

No habían habido “incidentes violentos”. La única violencia fue generada por el ataque policial contra los hinchas. Berni colocó como causa la sobreventa de entradas, que ahora en teoría será investigada por la Justicia. Si fuese cierta esta versión, que los familiares y muchos hinchas desmienten, bien podrían quedar implicados policías a cargo del control junto a autoridades del club. Nada de esto excusaría el método de ordenar a los palazos a hinchas que compraron entradas e intentaban entrar a ver el partido. En las primeras entrevistas, Berni defendía sin mosquearse que la supuesta sobreventa, una transgresión empresarial, se intentara resolver a palazos contra los espectadores, víctimas de la trasgresión.

Algunos periodistas dicen que los choques mayores con la policía se desencadenaron cuando estos golpearon a una niña en el ingreso. Fue muy marcada la decisión de escalar la represión en vez de retirar a los efectivos, llegando a inundar de gases lacrimógenos todo el estadio y disparar contra los periodistas que registraban los hechos.

La decisión de los responsables del operativo de seguridad de mantener selladas las puertas del estadio mientras se reprimía y tiraba gases aumentaba el pánico del público y la gravedad de la situación que se atravesó. Se buscó en todo momento garantizar el negocio, a costa de la salud y la vida de los hinchas.

Otras versiones hablan de ajustes de cuentas entre los mandos de la Policía Bonaerense encargada de la ciudad de La Plata. Sea como fuere, son los mandos delictivos de la Bonaerense los originarios de esta violencia, no los hinchas de fútbol.

Se habló de una descompensación de César Regueiro que dio lugar a su muerte. Sus familiares denunciaron que le partieron la cabeza en la represión y tiraron gases repetidamente mientras médicos intentaban resucitarlo.

“A mi hermano lo mató la policía. Que conste que lo mató la policía. No tuvo un paro cardíaco, están todos mintiendo. Mi hermano tiene una herida en la cabeza. Le partieron la cabeza de un garrotazo o de un balazo”, expresó Juan Domingo Regueiro, hermano menor de César, frente a todos los medios.

Tampoco es cierto que haya sido un hecho aislado, como ensaya en estas horas Axel Kicillof. La historia de la juventud y los trabajadores de la provincia de Buenos Aires, como en la Ciudad de Buenos Aires y en todo el país, está cruzada una y otra vez con hechos represivos cuando el pueblo trabajador quiere disfrutar un partido de fútbol, un recital de rock o cualquier otro evento masivo. La misma policía que militariza los barrios se dirige contra los concurrentes como una fuerza militar hostil. Los nombres Walter Bulacio o Rubén Carballo son algunos ejemplos de las vidas robadas a quienes solo esperaban concurrir a un hecho de esparcimiento, como “Lolo”, y fueron interceptados por los asesinos de uniforme.

Pasados los días, el gobernador Kicillof sigue defendiendo al ministro Berni, pero trata de posar de crítico y reflexivo. “La policía actuó de la peor manera”. “Hay que hacer cambios, pero lleva tiempo”.

A una fuerza unida al delito y dedicada a la represión, como la maldita Bonaerense, no hay que hacerle cambios. Hay que desmantelarla.

Berni se tiene que ir ya.

Justicia por César “Lolo” Regueiro.

https://www.prensaobrera.com/libertades-democraticas/berni-a-mi-hermano-lo-mato-tu-policia-la-verdad-de-la-masacre-policial-en-la-cancha-de-gimnasia