Este lunes 13, un centenar de personas se hizo presente en la concentración convocada por familiares y amigos de Brandon Romero, joven de 18 años asesinado el domingo 5 de julio por un subteniente de la policía bonaerense, Arcangel Bogado. Desde el Partido Obrero acompañamos la medida que culminó con una movilización hacia el municipio. Desde el gobierno de Guillermo Montenegro no se ha emitido pronunciamiento alguno ni se han comunicado con los familiares.

La concentración se realizó el mismo día que la fiscalía citó al oficial imputado que, luego de varias horas, declaró haber disparado ante un supuesto robo: “se me vino encima y dispare”, indicando que lo hizo a una distancia de cuatro metros y que Brandon había sido atropellado por varios vehículos. Sin embargo, la autopsia y algunas pericias policiales indican que Brandon recibió varios disparos, uno de ellos en la nuca lo que provocó su muerte. En el lugar no se encontraron rastros de armas excepto la empuñada por Bogado. Al día de hoy el subteniente goza de licencia y aún conserva su cargo.

El episodio fue relatado desde un principio por el fiscal y la policía como un acto de defensa ante el intento de un robo. Inclusive, llegó a difundirse que Brandon había muerto al caer de la moto y ser atropellado por un vehículo que se dio a la fuga, luego de haber recibido dos disparos en las piernas y uno en el hombro. Poco tiempo después, tras la dimensión que tomó el caso en los medios y la difusión de familiares y conocidos en las redes sociales, trascendieron testimonios y detalles del hecho que indican que el caso se trata de un claro fusilamiento por parte del oficial de la policía.

Por otro lado, las cámaras que deberían registrar lo que ocurre en la ruta no tienen el lapso de tiempo durante el cual ocurrió el hecho. Al mismo tiempo, el único testigo que se encontraba con Brandon al momento del fusilamiento fue detenido por otra causa vinculada a un robo, que según la fiscalía venía siendo investigada desde hace tiempo y nada tiene que ver con lo que pudiese aportar a la investigación actual.

Esto ocurre en el marco de una ola de casos de gatillos fácil que azotan a la provincia de Buenos Aires sumado a la desaparición de Facundo Castro desde hace más de 70 días. De esta escalada represiva en el marco del aislamiento preventivo, nada han dicho el ministro de Seguridad, Sergio Berni, y el gobernador Axel Kicillof.

Desde el Partido obrero y el Polo obrero nos hemos movilizado y solidarizado con la familia reclamando el inmediato esclarecimiento del caso. Denunciamos la militarización de los barrios y todos los atropellos policiales que tienen como blanco principal a la juventud.

Exigimos justicia ante este nuevo caso de gatillo fácil. Justicia por Brandon Romero.

 

 

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