Marcha en Rosario reclama la inmediata libertad de Guillermo Piccolo

El PS se monta a la ola represiva de Patricia Bullrich para encarcelar a un docente

El martes 20, una movilización recorrió las calles de Rosario reclamando la inmediata libertad de Guillermo Piccolo, detenido por movilizarse y organizarse contra los desalojos en el barrio de la República Sexta, un humilde asentamiento obrero, lindante a la Ciudad Universitaria de la Universidad Nacional de Rosario. Piccolo es docente del prestigioso colegio preuniversitario Politécnico y es un militante social que acompaña a los vecinos de ese lugar.


Los intentos de desalojo llevan meses. El ensañamiento tiene de fondo un gran negociado entre el gobierno provincial, municipal, la UNR (que cede los terrenos) y el capital inmobiliario. Las tierras de la zona forman parte de la codiciada costanera cercana al río Paraná.


La detención fue acompañada por el dictado de prisión preventiva, por parte del juez Hernán Postma, que condenó a 43 días de detención a Piccolo argumentando su participación en un corte de calle. Incluso, agravaron las condiciones de su detención, trasladándolo a la cárcel de Piñero, lo que revela la saña de una justicia instruida por el poder político para defender los negociados inmobiliarios.


La represión sobre los vecinos del barrio La Sexta no es una novedad. En reiteradas ocasiones, la policía militarizó la zona, arremetiendo con gases y balas de goma contra los vecinos y estudiantes de la zona universitaria. Anteriormente, hubo golpizas y detenciones ilegales por parte de la policía.


Los argumentos de la sentencia que ordena su detención y por el cual un docente solidario con vecinos humildes es enviado a la prisión de otra ciudad, es “entorpecimiento del tránsito por haber efectuado un corte de calle”. Como lo expresó el documento político que se leyó en la marcha que se realizó exigiendo su liberación: “La detención de Guillermo es un salto en calidad en la política represiva del gobierno”.


Con la sentencia contra Guillermo, el gobierno de Miguel Lifschitz se inscribe en la política represiva de Macri-Bullrich de reprimir las movilizaciones populares y buscar el amedrentamiento con la cárcel y la persecución a los luchadores en defensa de jugosos negocios capitalistas. El Partido Socialista se suma a las detenciones contra los militantes populares, como en el caso de los compañeros César Arakaki, Dimas Ponce y Daniel Ruiz en ocasión de la movilización contra la reforma jubilatoria dictada a medida del FMI.


De la movilización que exigió la libertad de Guillermo, convocada por la Coordinadora anti represiva de Rosario, participaron organizaciones sociales, Amsafe Rosario, centros de estudiantes terciarios, secundarios y los estudiantes del colegio pre universitario Politécnico donde Guillermo ejerce como docente, así como también los partidos del Frente de Izquierda. Participaron también el conjunto de las fuerzas de izquierda a excepción del PCR-ALDE cuyos consejeros universitarios votaron favorablemente por el inicio de las obras en el lugar sin precisión alguna, otorgándole un cheque en blanco a las camarillas universitarias, que luego junto al gobierno y a la policía comenzaron a desalojar el barrio. Como en otras ocasiones donde se reclama por la libertad de un militante detenido por luchar, estuvieron ausentes las fuerzas que responden al kirchnerismo, un silencio cómplice favorable a la política capitalista y represiva de la intendenta Mónica Fein y Lifschitz.


El Partido Obrero reclama la inmediata libertad de Guillermo Piccolo y el cese de toda persecución a los vecinos del Barrio la Sexta. Le oponemos a los negociados inmobiliarios del Frente Progresista la titularización de las casas que hace decenas de años pertenecen a los vecinos y el mejoramiento del barrio en función del interés de la comunidad educativa y de sus vecinos.