Más de 5.000 en la calle

Por el juicio y castigo a todos los responsables del asesinato de Fuentealba

Las asambleas de ATEN votaron un paro y marcha provincial para el 4 de julio. Si bien algunas incluyeron puntos reivindicativos pendientes de la huelga (insuficiencia del aumento, 80% para jubilados y otros), el tema central es el reclamo de justicia por el fusilamiento de Fuentealba. La causa, según denuncia el abogado de la familia, no registra avances significativos.


Desde la detención del policía que fusiló a Fuentealba (a comienzos de abril), la investigación no ha llevado al banquillo a ningún jefe policial (ni a la plana mayor ni a los que actuaron en Arroyito). Mucho menos, por supuesto, a los responsables políticos, como el gobernador y sus ministros. La causa se ha desdoblado y las responsabilidades políticas se investigan por "cuerda separada" de la que llevó a prisión preventiva al que apretó el gatillo.


El libreto de la impunidad sigue los pasos del Puente Pueyrredón.


Hay que redoblar la lucha política, es decir, independizar las acciones por el juicio y castigo a todos los responsables de toda influencia de los cómplices "K" y la burocracia ceterista.


Más de 5.000 compañeros en la calle


Con un paro y movilización los trabajadores de la educación de Neuquén reclamamos el juicio y castigo a los fusiladores y que se vaya Sobisch.


Más de 5.000 marchamos y realizamos un acto frente a la Casa de Gobierno.


La predisposición de docentes y estudiantes a quebrar la impunidad sigue vigente.


Pero el operativo para proteger a todos (el que apretó el gatillo, el que lo dirigió y el que lo planificó y se hace cargo políticamente) no descansa ni un momento.


A 24 horas de esta movilización se conoció que el juez había concedido el traslado del policía Poblete a Zapala (su lugar de residencia y tareas), para que siga detenido, pero "cuidado" por sus compañeros de fechorías.


Y un día después el jefe de Policía, en un acto oficial, reivindicó a Poblete definiéndolo como un "referente de la institución policial" porque "no nos tenemos que olvidar que es un efectivo policial y estaba en servicio…" (Río Negro, 7/7).


Toda esta situación, junto a la licuación del salario por la inflación y carestía, y el proyecto de reforma educativa-laboral que el gobierno tramita en el CPE, preparan el terreno para que luego del receso invernal haya que retomar la lucha.