Cecilia Pando -apologista de la dictadura, defensora de asesinos seriales, secuestradores, violadores, apropiadores de niños y otras joyas por el estilo- dijo haberse sentido "avergonzada" por un fotomontaje de la revista Barcelona, la que se dedica, como se sabe, a la sátira política (Barcelona, en ese fotomontaje, la hizo aparecer vestida con ropas estilo sadomasoquista, cuando esta mujer, sin miedo al ridículo, se encadenó al edificio Libertador para pedir la libertad de criminales condenados). ¿Cuánto vale la "vergüenza" de la señora? No mucho, con 70 mil pesos se arregla. Por lo menos, eso es lo que le reclama a la revista en concepto de indemnización.

Pando llamó en su auxilio a un grupo de tareas patético. Fueron testigos de su condición de "madre de familia de óptimas costumbres, de familia numerosa y cristiana" la mujer del ex capitán Carlos Plá (condenado a perpetua por secuestros, torturas y asesinatos en San Luis) y la esposa del ex mayor Ernesto "Nabo" Barreiro (ex jefe del centro clandestino de exterminio La Perla, en Córdoba).

Al igual que La Naranja de Prensa, la redacción de Prensa Obrera se solidariza activamente con los periodistas demandados, Ingrid Beck y Mariano Lucano, y con todos los trabajadores de Barcelona.