Represión en Lanús a vecinos en lucha por tierra y vivienda

El secretario de Seguridad Diego Kravetz se tiene que ir. Vamos por asambleas barriales para organizar los reclamos.

Frente al legítimo reclamo por tierra y vivienda de una treintena de familias de la localidad de Valentín Alsina, la respuesta del Estado ha sido nuevamente la persecución y represión. En la madrugada del miércoles 26 un brutal operativo conjunto de fuerzas locales y federales desalojó, sin orden judicial alguna, a los vecinos del barrio Pampa que se encontraban realizando una olla popular para paliar el hambre y la desocupación que azotan el barrio.


Las fuerzas represivas dispararon balas de goma y gases lacrimógenos sobre los asistentes a la olla, muchos de ellos mujeres y niños, dejando varios heridos como saldo de la represión, entre ellos una mujer que recibió un balazo en la cara y un vecino que tiene 25 impactos de bala en todo el cuerpo. La policía llevó adelante una cacería, ingresando a los tiros a una casa con peligro de derrumbe, donde destruyeron a patadas la cocina de la familia y se llevaron dos detenidos. Luego de que familiares y vecinos reclamaran su liberación y tras haber sido golpeados salvajemente en la comisaría, ambos fueron puestos en libertad el viernes al mediodía.


En la toma sobre terrenos del ferrocarril en el Barrio Pampa participan 35 familias que, frente a la imposibilidad de continuar pagando un alquiler, decidieron organizarse por una vivienda propia en el marco de la inexistencia de viviendas sociales, crecimiento del desempleo, baja de los salarios. La toma lleva alrededor de dos meses en los cuales han sido hostigados repetidas veces por las fuerzas represivas.


El municipio de Lanús ignora el reclamo de las familias y, previo a la represión, ha tomado numerosas medidas tendientes a expulsarlos: han prácticamente cerrado el comedor que funcionaba en el barrio, que pasó de abrir todos los días a sólo una vez por semana desde que se montó la toma, y le retiraron la tarjeta de ayuda alimentaria a una vecina que participa en la misma. Se volvieron a poner de manifiesto los problemas estructurales que atraviesan a todo el distrito, en donde las obras de carácter vial propagandizadas por el intendente Néstro Grindetti (Cambiemos) sólo empeoran, el cuadro al alentar la especulación inmobiliaria al mismo tiempo que no existe planes de viviendas sociales o de urbanización.


Diego Kravetz, secretario de seguridad del distrito y responsable de este atropello declaró que “se trató de una guerra entre vecinos”, una impostura. Kravetz, responsable de esta y otras represiones (como la llevada adelante en el comedor “los cartoneritos”) se tiene que ir.


Reclamamos el cese de la represión y la satisfacción de los reclamos de los vecinos, así como la restitución de la ayuda alimenticia. Defendamos la toma de los atropellos policiales y municipales. Pongamos en pie una asamblea de los vecinos para llevar la toma del Barrio Pampa a la victoria, definiendo un plan de lucha por un plan de viviendas y obras públicas bajo control de los vecinos y desocupados.