Una gran movilización de más de 20 organizaciones de trabajadores desocupados y precarizados a la sede del Indec, en repudio a la política de hambre y desocupación del gobierno nacional, fue reprimida a golpes por la Infantería, alrededor de las 14 h.

Junto a ello, fueron detenidos los manifestantes Sarena Daiana (luego liberada por la movilización) y Nicolás Oliva, quien fue llevado a la comisaría. Hacia allí se dirigió una delegación de la marcha para reclamar su liberación.

Eduardo Belliboni, del Polo Obrero, reclamó la libertad de Oliva y señaló que la represión y lasd detenciones (que tuvo lugar sobre la parte más débil de la columna de manifestantes) buscaban “correr el eje” de los reclamos expresado por las organizaciones. En ese sentido, advirtió que “el Ministerio de Desarrollo Social dijo que mañana va a haber una respuesta para el alta a los programas sociales solicitado por miles de compañeros”, cuando “ya está llegando la apertura de nuevas planes y el aumento del monto que hemos arrancado con la lucha anterior” (con una serie de grandes jornadas nacionales de piquetes).

Belliboni destacó que “la pelea contra el hambre, por el trabajo, no se detiene en la Argentina, porque no se detiene la desocupación, la explotación de millones de personas que no tienen ni para comer mientras los bancos se llevan los recursos al exterior y continúa el festival financiero y el pago de la deuda externa”. Y anunció que se profundizará la movilización si mañana no hay respuestas concretas por parte del Ministerio.

En un comunicado conjunto, las organizaciones convocantes señalaron que “a la desesperación de millones de familias que no tienen para comer” se suma “la represión salvaje, que por tercera vez detiene mujeres compañeras que todos los días dan la lucha en los barrios, poniendo en pie comedores populares”. Y que se mantendrán en estado de movilización hasta la liberación de Nicolás Oliva.