Este 13 de noviembre, tuvo lugar en la ciudad de Rosario el inicio del juicio de la causa por delitos de lesa humanidad denominada “El Villazo” por el secuestro, desaparición y torturas de 69 personas en Villa Constitución. Se juzgarán a más de 20 represores, entre ellos personal de la Policía Federal y de la Policía de Santa Fe, así como a directivos de la empresa Acindar, que jugaron un rol clave en organizar la represión criminal, torturas y desapariciones en 1975 contra obreros metalúrgicos y contra la población de Villa Constitución en el operativo denominado “Serpiente Roja del Paraná”. Luego de una lucha incansable de sobrevivientes, familiares de víctimas y organismos de Derechos Humanos, 48 años después, el Poder Judicial habilitó el inicio del juicio que se presume durará varios años.

El objetivo de dicha represión, ejecutada con la complicidad del gobierno de Isabel Perón, era descabezar a la vanguardia metalúrgica combativa que había desplazado a la burocracia sindical de Lorenzo Miguel y que en 1974 convocó a un plenario sindical nacional que congregó al movimiento obrero antiburocrático, combativo y clasista en Villa, reagrupando a toda una experiencia de ascenso obrero que inauguró el Cordobazo en 1969. En dicho plenario, participaron nuestros compañeros de Política Obrera, Fisher y Bufano, dirigentes clasistas de la pintura y delegados de la fábrica Miluz, que también fueron desaparecidos por la Triple A, dando cuenta de la magnitud del plan de criminal urdido desde el poder para aniquilar a una vanguardia obrera, que allanó el camino del golpe genocida de 1976.

En el inicio del juicio se movilizaron sobrevivientes y familiares de víctimas, la APDH, Nietes Rosario, trabajadores de Acindar Villa Constitución con su comisión interna, de Aceiteros, de la Amsafe Rosario y de la provincial. Ganó las calles una nutrida presencia del Polo Obrero y el Partido Obrero, del MST, de la CUBA-MTR. Participaron algunas delegaciones de los partidos del FIT-U. Estuvieron presentes los dirigentes del Partido Obrero, la Diputada Nacional Romina Del Pla y Carla Deiana, así como dirigentes nacionales del MST.

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En el comienzo del juicio, enormemente demorado, hubo mucha emoción. La causa se instruye desde hace una década y atravesó los distintos gobiernos que lo fueron frenando en complicidad con un Poder Judicial que permitió que el tiempo pase favoreciendo la impunidad biológica, así como viajes al exterior de represores imputados en la causa. Ahora, sigue la pelea para que el desarrollo del juicio sea trasladado a Villa Constitución y se realice en el lugar mismo de los hechos, y de cara a toda la población de la ciudad que reclama juicio y castigo a los genocidas.

“Serpiente Roja del Paraná” bajo el gobierno de Isabel Perón

El operativo “Serpiente Roja del Paraná” consistió en el desembarco el 20 de marzo de 1975 en Villa Constitución de alrededor de 4.000 agentes de las fuerzas represivas legales e ilegales de la Triple A, que sitiaron la ciudad y comenzaron con una cacería de delegados, militantes y activistas obreros, en su mayoría de la UOM, con represión, tortura, desaparición y muerte de 69 víctimas y la detención de alrededor de 200 trabajadores de la ciudad. El operativo estuvo al servicio de los intereses de la empresa Acindar de liquidar a la vanguardia metalúrgica que le hacía frente. La empresa formó parte del plan criminal para aniquilarlos, entregando legajos y domicilios de los activistas obreros a las fuerzas represivas, brindando un lugar físico que sirvió como centro clandestino de detención, conocido como “albergue de solteros”, financió con sobresueldos a las fuerzas de seguridad, les brindó asistencia mecánicas en los talleres y cedió vehículos a los genocidas. El presidente de Acindar en ese momento era Martínez de Hoz, quién luego sería el ministro de economía de la dictadura del ´76.

En noviembre de 1974 la lista marrón, encabezada por Piccinini, ganó las elecciones en la seccional de la UOM Villa Constitución, expulsando a la burocracia sindical de Lorenzo Miguel, de la UOM nacional, que no reconoció la victoria de la Lista Marrón en la seccional de Villa. Ese mismo año se produjo el “Villazo”, una verdadera gesta obrera donde los metalúrgicos de las fábricas Acindar, Marathon y Mecon, salieron a la calle masivamente acompañados por el pueblo de Villa Constitución para levantar toda una serie de reclamos, entre los que se encontraban el reconocimiento de las comisiones internas y el cese de la intervención de la seccional de Villa recuperada por parte de la burocracia sindical de la UOM nacional. El Plenario Nacional Antiburocrático del año 19174 en Villa Constitución fue un hito de movilización política del movimiento obrero combativo, del cual nuestra corriente predecesora Política Obrera participó activamente, desarrollando el planteo de poner en pie una Coordinadora Nacional Clasista del movimiento obrero.

El hecho de que tamaña represión se haya realizado bajo el gobierno constitucional y peronista de Isabel Martínez de Perón, y que contara con una “pata civil” como lo fue la participación activa de Acindar, demuestra una vez más que el accionar criminal que luego desembocaría en el terrorismo de Estado había comenzado mucho antes del inicio de la dictadura, y que fue orquestado y alentado por el poder económico y el gobierno constitucional. En esto reside una de las características claves de este juicio y que le da todavía más relevancia política e histórica para los trabajadores.

La clase capitalista, en este caso Acindar, junto a las fuerzas represivas policiales y parapoliciales, bajo el gobierno peronista de Isabelita, buscaron aniquilar físicamente a una vanguardia obrera referenciada en el clasismo, que había transitado el Cordobazo y estaba construyendo un camino de independencia política separada del peronismo y que, en algunos sectores, se proponía una perspectiva de poder obrero. Como no pudieron, tuvieron que ejecutar una dictadura militar.

Acindar, la misma empresa capitalista que accionó de forma criminal en los años previos a la dictadura, impulsó luego el terrorismo de Estado y hasta aportó al ministro de Economía. Ahora, tras 40 años de democracia, sigue siendo una de las empresas más beneficiadas del país, contando con los favores de los distintos gobiernos locales y nacionales, impulsando una zona franca para la exportación, manteniendo a la mitad de sus trabajadores tercerizados.

Desde el Partido Obrero reivindicamos las gestas obreras como lo fue el Villazo, el Cordobazo y los Rosariazos. Acompañamos a los trabajadores sobrevivientes, a los familiares y querellantes en esta lucha. Planteamos el juicio y castigo a todos los genocidas, al personal de Acindar y a todos los responsables del operativo “Serpiente Roja del Paraná”. Exigimos la cárcel común y efectiva para todos ellos, así como el reclamo del traslado del juicio a Villa Constitución.

Seguimos reclamando la apertura de todos los archivos de la dictadura.
Por la Memoria, la Verdad y la Justicia.

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