A 10 días del asesinato de Isaac Muñoz, que provocó una enorme reacción popular, seguida de represión por parte de la policía, Capitán Bermúdez (Santa Fe) se movilizó nuevamente ante otro asesinato. Ahora fue el turno de Lautaro Aranda, un joven de 23 años oriundo de Capitán Bermúdez, que fue acribillado en la ciudad aledaña de Granadero Baigorria, cuando atendió la puerta en la casa de su tío. Hasta el momento, las investigaciones indican que fue un ajuste de cuentas narco y que Lautaro recibió un ataque que no era para él.

En horas de la tarde, gran cantidad de vecinos se movilizaron desde barrio Batallán, donde Lautaro vivía, hasta la Municipalidad de Capitán Bermúdez. Muchas familias se fueron sumando a medida que la movilización avanzaba por la ciudad. Una vez frente al poder político de la ciudad otras madres y familiares de víctimas de la región hablaron sobre sus casos y aunaron el pedido de justicia y el reclamo frente a la impunidad que reina en el cordón.

Hartazgo popular contra un régimen de impunidad

La población de Bermúdez viene de una enorme movilización hace tan solo unas semanas frente al asesinato de Isaac Muñoz. El intendente y la policía respondieron con una dura represión sobre los vecinos, que terminó en detenciones y hasta acciones de tortura en la comisaría de la ciudad.

Hace solo algunas semanas, el gobernador Perotti y el intendente de Rosario Javkin, fueron echados al grito de “Que se vayan todos” de la movilización que reclamaba Justicia por Joaquín Pérez. Un joven de 34 años, asesinado en el barrio de Arroyito de Rosario.

Hay un gran hartazgo popular, frente a la ola de asesinatos que azota a la provincia y particularmente en las últimas semanas al cordón industrial del departamento de San Lorenzo. Hartazgo frente al poder político y los partidos de gobierno cómplices directos del poder narco que se sigue cobrando vidas en la provincia, y frente a la policía que es parte activa y organizadora del gran delito, y que solo interviene para reprimir a la población trabajadora cuando se moviliza por una causa justa.

Exigimos justicia por Lautaro Aranda. Basta de zonas liberadas, apertura de los libros de las comisarías al control vecinal. Las bandas narco prosiguen su accionar, en la medida que los puertos siguen siendo privados, mientras continúa el contrabando y el lavado de dinero que involucra a las más altas esferas económicas. Es un régimen narcosojero, que hay que enfrentarlo con la movilización y la lucha.