Vamos por una gran campaña contra la persecución judicial a Belliboni y Kuperman

Apel

Foto: Ojo Obrero Fotografía

La respuesta a las jornadas de lucha de los desocupados, y en particular de los sectores que decidieron mantener el acampe de 48 horas ante las oficinas de Desarrollo Social, ha sido la represión y el inicio de causas penales contra sus dirigentes.


Luego de llevar adelante una represión totalmente injustificada, avanzando sobre los desocupados movilizados y en particular contra la columna del Polo Obrero en la primera jornada del miércoles 11, ante la contundencia de la medida y el fracaso de la provocación, 24 horas después, el gobierno ha pedido el inicio de causas penales.


Eduardo Belliboni fue notificado en su domicilio del inicio de una causa penal en su contra, que tramitaría en la Justicia de la Ciudad de Buenos Aires. En forma simultánea, se anunciaba a los medios que el Ministerio de Seguridad había iniciado una causa penal contra Oscar Kuperman, radicada ante el juez Claudio Bonadio. A Belliboni, según circuló en medios de comunicación, le pretenden imputar lesiones, mientras todo el país fue testigo de que la columna piquetera fue víctima de una embestida sin provocación alguna por parte de la infantería de la Policía de la Ciudad. Kuperman, mientras tanto, fue denunciado por Bullrich por incitar a saqueos cuando declaró que su organización reclamaría alimentos a supermercados si el Estado no se los entregaba. Más allá que desde el Partido Obrero no promovemos esta forma de reclamo, entendiendo que hay que centrar fuerzas en dirigirse contra el Estado, rechazamos terminantemente que se quiera confundir los reclamos de las organizaciones con acciones de saqueo y, más aún, que se quiera ejercer el delito de opinión por declaraciones a medios de comunicación.


El camino elegido por el macrismo ante los reclamos populares es criminalizar. La respuesta es desde el más profundo instinto de preservación de las clases dominantes y también desde el futuro gobierno de Alberto Fernández.


El candidato del Frente de Todos se ha visto obligado a mostrar que su futuro gobierno necesariamente no será de todos y ha expresado que no acompaña la movilización de los desocupados, llamando a la población a no salir a la calle.


Hebe de Bonafini ha expresado sin filtro el verdadero sentir del PJ y el kirchnerismo sobre la movilización popular, atacando a los dirigentes del Frente de Izquierda, Néstor Pitrola y a Nicolás Del Caño, expresando que deberían ser detenidos.


Esta es la única respuesta que tienen los partidos de la burguesía contra los reclamos populares y la creciente pobreza. Las movilizaciones de los desocupados pusieron en la agenda política el hambre y el agravamiento de las condiciones de vida de las masas.

El Plenario del sábado pasado de organizaciones obreras y desocupados (ver páginas centrales), llamando a una jornada de cortes y piquetes para el 24 próximo, estableció un nuevo salto de organización y movilización popular contra el ajuste de Macri, los gobernadores, el FMI, en contraposición con la acción de contención de las masas del triunvirato piquetero y la CGT.


La derrota de la criminalización de estas protestas se dará en el marco de la movilización popular.


Llamamos a lanzar una gran campaña nacional e internacional por el cierre de las causas penales, contra los dirigentes del acampe y el movimiento de desocupados, Eduardo Belliboni y Oscar Kuperman.