“Hubo 31 detenidos sobre los que el juez dictó una orden de incomunicación que se iba a mantener hasta el lunes, pero fruto de las denuncias que hicimos distintos abogados, el juez comenzó las indagatorias el domingo", cuenta a Prensa Obrera la abogada Claudia Ferrero, integrante de Apel, quien colaboró con su labor para la liberación de los detenidos durante el fin de semana. "Hay una imputación completamente genérica que en principio divide a los detenidos en cuatro grupos a los que se acusa desde tirar piedras a molotov y provocar incendios en distintos lugares. Sin embargo, las declaraciones de varios detenidos probaban que las imputaciones son falsas. Muchos fueron detenidos en lugares y horas diferentes a los que marca el expediente, lo que marca la nulidad de la operación. Uno detenido, por ejemplo, llama a la esposa a las 21:20 y le dice que está en un lugar tranquilo y que luego iba a ir a su casa, cuando el acta de detención dice que fue detenido a las 20:18”. Quizás se trate de una de las menores irregularidades en todo un operativo de cacería que sólo puede ser calificado de ilegal, pero que también marca las nulidades del proceso.

 

 

Ernesto Gut, director de las películas 40 balas y Una historia de las madres, se encontraba en un bar cuando vio cómo la policía comenzaba a dar caza a los transeúntes. “Cuando vi las corridas tomé la cámara –dice a Prensa Obrera–. Vi que detenían a gente que no estaba haciendo nada. Detuvieron a dos fotógrafos, a uno le pegaron unos balazos de goma en la cara, ejecutados a cinco metros. Vi una detención completamente arbitraria de un pibe que no estaba haciendo nada, un estudiante de fotoperiodismo. Se estaban llevando a periodistas en el operativo”.

 

Las personas detenidas podrían ser imputados por delitos que podrían acarrearles penas que llegan a los diez años de prisión. “Yo vi un ensañamiento con quienes estaban cubriendo la marcha y registrando la represión", agrega Gut. “No sólo hubo detenidos, sino que hubo muchos más heridos. Una compañera de Anred tiene 20 impactos de bala de goma en la pierna”, denuncia.

 

“Se sabe que hubo 23 heridos, pero en el sumario sólo aparecen como heridos los miembros del personal policial”, indica la abogada Ferrero.

 

Se impone investigar la acción represiva de la policía y de la Ciudad y que se libere de las imputaciones a los detenidos.