Violencia policial en Hurlingham: “repetían que la comisaría era su casa y ahí hacían lo que querían”

Dialogamos con Ezequiel Fernández, detenido irregularmente y golpeado por la policía bonaerense.

En un nuevo episodio de violencia estatal, el sábado 15 de agosto varios oficiales de la policía bonaerense detuvieron por una leve infracción de tránsito a Ezequiel Fernández y a la Dra. Elida Fernández, que oficiaba como abogada defensora. Luego de múltiples amenazas en el medio de la vía pública, fueron esposados y trasladados a la Comisaría 3ª de William Morris. Ninguneados y golpeados por varios de los efectivos en una detención arbitraria que duró más de cuatro horas, las víctimas sufrieron lesiones y patrulleros deambularon por sus domicilios los días subsiguientes.

Al dialogar con Ezequiel, queda de relieve la irregularidad del detenimiento: “Lo único que hice fue subirme a la moto para que no sea secuestrada, es mi única herramienta de trabajo”. Sin embargo, la respuesta que recibió de los oficiales fue lisa y llanamente un atropello. Según comenta, “me dijeron que si no me bajaba me iban a moler a piñas”. Videos filmados por vecinos que transitaban el centro de William Morris dan cuenta de este accionar vergonzoso de la bonaerense. Para completar el combo, ninguno de los oficiales quiso identificarse, aludiendo que “no hacía falta”.

Llegados a la comisaría, un oficial levantó el chaleco de Ezequiel y le dio dos golpes a la altura del hígado. Lejos de ser este el único agravio, el vecino nos comenta: “me apretaron de más las esposas a propósito, se reían de nosotros, fumaban en nuestra cara. Repetían todo el tiempo que la comisaría era su casa, y que en su casa hacían lo que ellos querían”. Por parte de los detenidos fue sucesivo el pedido para que se llame a un médico, debido a que presentaban problemas de salud precedentes; sin embargo, la bonaerense los ignoró. Los mismos policías “custodiaban” la puerta para que nadie pueda ver lo que estaba sucediendo.

Luego de cuatro horas de ninguneos, golpes e insultos, ambos detenidos fueron liberados. Sin embargo, luego de realizar las denuncias correspondientes por el abuso policial, la bonaerense comenzó a merodear sus domicilios, haciendo llamadas y mostrándose de forma intimidatoria.

Desde el Partido Obrero Hurlingham acompañamos a las víctimas de este abuso de poder y reclamamos que se detecten de manera inminente a sus responsables para que sean destituidos de sus funciones. El avance de las fuerzas represivas en la cuarentena ha arrojado cientos de atropellos a las libertades democráticas de los trabajadores, junto a asesinatos de gatillo fácil y desapariciones forzadas, como la de Facundo Castro. Es por eso que desde el Partido Obrero decimos: ¡Fuera Berni! El Estado es responsable.

Llamamos a todos los vecinos a librar una campaña de difusión para no dejar pasar lo ocurrido.