El Polo Obrero tomó las banderas de la lucha por la tierra y las viviendas, y contra la ola de injustos desalojos a las familias que por diversas situaciones han acumulado deudas impositivas. Opera, en estas circunstancias, una verdadera mafia organizada, mientras de manera sospechosa la Justicia falla rápidamente en favor de martilleros, inmobiliarias y testaferros. Primero desalojaron de sus tierras, para sembrar soja, a los pequeños y medianos campesinos; luego, a los hermanos aborígenes; a los que no pudieron desalojar, los fueron exterminando con el flagelo de la desnutrición, que todavía hoy produce estragos en nuestra provincia. Ahora vienen por las familias trabajadoras.

Es así que, asambleas y movilizaciones mediante en las barriadas, logramos poner en evidencia y frenar esta injusticia.

La crisis habitacional, como en todos los rincones del país, ha comenzado a explotar. Considerando que los trabajadores en general integran familias numerosas, los hijos, a temprana edad, van conformando su propia familia y se produce inevitablemente el hacinamiento.

Las compañeras del Polo de Barranqueras, habitantes del asentamiento, nucleamos a las vecinas de los barrios aledaños, en un ambicioso proyecto que será modelo a continuar en otros barrios y/o asentamientos. Exigimos al Estado la construcción de un Hogar Refugio para las mujeres golpeadas o en situación de riesgo, junto a sus hijos, dentro del mismo asentamiento, con el control de las trabajadoras.

En las escuelas, el Polo Obrero tiene una muy buena inserción. Estamos apoyando a los docentes, como padres y como organización, en su lucha reivindicativa por salarios dignos, defensa de la escuela pública y comedores escolares.

La victoria que hemos obtenido con la lucha por lograr la expropiación, modificación de ley mediante, en los lotes del asentamiento para urbanizar con la construcción de viviendas de tipo social para 60 familias, ha motivado a compañeros de otras organizaciones que también luchan por este objetivo, a plegarse a nuestra lucha. Estamos asistiendo a la mensura, juntamente vendrá la lucha por el agua, la luz y la inmediata construcción de las viviendas. En la localidad de Fontana, logramos que el gobierno realice la mensura para acceder luego a la titularidad de sus viviendas para decenas de familias que habitan un asentamiento, desde hace muchos años.

Días pasados, fuimos castigados duramente por una fuerte tormenta, que voló los techos de los asentamientos. Nos movilizamos a los municipios de Barranqueras y Fontana, donde logramos la asistencia a los compañeros con chapas, colchones, frazadas y rollos de plástico. Para la celebración del Día del Niño, le arrancamos 1.000 raciones para la chocolateada en las localidades de Fontana, Villa Federal y Barranqueras, que en todos los casos fue exitoso. Ahora estamos preparándonos para una gran movilización nacional el 11 de septiembre.