Más de 2.000 compañeros (1.500 en la columna del Polo Obrero) pertenecientes al Mtr, a UniDHos, la Aníbal Verón y Barrios de Pie, participaron del gran piquete frente a la delegación local de Ministerio de Trabajo de la Nación. Se entregó en la delegación un petitorio apoyando los reclamos que en ese momento se efectuaban en la Capital y declarando que nos quedaríamos allí hasta que la delegación central obtuviera una respuesta favorable. Se mantuvo cortada la crucial avenida Maipú desde las 11 de la mañana hasta las 16, cuando conocimos la resolución adoptada en Buenos Aires; se armaron ollas populares y una verdadera organización para sostener el piquete sin resquebrajarse bajo los rayos de sol.

La movilización había comenzado más temprano con una marcha hacia la Municipalidad, junto a la Multisectorial, para exigir que se cumpla la voluntad popular expresada en las más de 116.000 firmas de la revocatoria, y que Kammerath se vaya ya, y junto con él, el Concejo Deliberante.

La extraordinaria columna del Polo Obrero no surgió de la nada, hace 15 días que venimos luchando contra el no pago de los planes y la caída de más de 20.000 en toda Córdoba. Tuvimos 3 jornadas masivas de lucha donde logramos recuperar la mayoría de los planes caídos que correspondían al Bloque. El miércoles 23, más de 1.200 piqueteros del Polo Obrero, Barrios de Pie y UniDHos cortamos la céntrica esquina de Colón y Gral. Paz durante más de 2 horas, allí hicimos una sentada y resolvimos marchar hacia la Gerencia de Empleo, donde estuvimos cortando por casi tres horas. El martes 29 volvimos ante la falta de respuesta y esta vez, junto con los compañeros de UniDHos, mantuvimos una dura jornada de más de 10 horas de piquete y movilización. Por lo tanto, veníamos fortalecidos por esa lucha y habíamos decidido que íbamos por más, incluyendo a todos aquellos que no cobraron nunca y a exigir la duplicación del valor de los planes.

El fortalecimiento de la lucha piquetera se produce cuando la lucha salarial en Córdoba ha comenzado a cobrar vuelo. Los trabajadores de la empresa Cliba mantienen un paro a rajatabla por el atraso en el pago de los salarios y están a punto de triunfar; lo mismo sucede con los docentes secundarios que están con retención de tareas por el atraso en el pago. Pero, además, el 15 hay una movilización de empleados públicos y docentes reclamando aumento de salarios. La movilización ha sido convocada por los gremios ante la efervescencia que existe en las bases. En el caso de los empleados públicos ha habido movilizaciones y cortes de calle en dependencias, hospitales, etc. Existe el fundamentado rumor de que De la Sota no podrá pagar salarios, porque la bancarrota de la provincia es evidente.

El movimiento de lucha que se ha desarrollado notablemente entre los desocupados tiende a empalmar con los trabajadores ocupados en una lucha común contra la miseria. La marcha nacional del 19 y 20 por un nuevo Argentinazo será el punto de encuentro más desarrollado para imponer la huelga general y una salida obrera al derrumbe capitalista.