Los compañeros del Polo Obrero de Barrio Copello el 14 de septiembre hicimos entrega al Concejo Delibe­rante de la ciudad de Capitán Bermúdez, y del proyecto de Centro Cultural Recreativo Comunitario, exigiendo que sea reconocido co­mo de interés cultural, que se rea­lice la expropiación del predio don­de funciona (que ocupa un cuarto de manzana), que se subsidien los servicios de luz y agua, y que de manera urgente se otorguen los re­cursos materiales y humanos para continuar trabajando en los 6 pro­yectos que allí funcionan, los cua­les son de suma importancia, ya que la deserción escolar es altísi­ma, los niños cirujean a temprana edad, y la calle les ofrece droga, al­cohol y prostitución, siendo este centro un lugar alternativo a toda la barbarie a la que están expuestos nuestros chicos.

Hubo desentendidos, traspapé­leos, exigencias burocráticas, agita­ción en los medios, y la consecuen­te presencia del Polo en el Concejo cada vez que había votación y has­ta cuando el mismo presidente del Concejo se atrevió a decir: “Apenas he podido ojear el proyecto, y he apreciado que tiene extractos de un partido político que no tiene rele­vancia parlamentaria, por lo tanto no tiene quórum para ser aprobado"... Luego de quedar demostrada su te­rrible incapacidad, logramos torcer­le el brazo al Concejo de los Várela y Cinallis, ya que aprobaron nuestro proyecto y lo elevarán al intendente para que lo ejecute.

La lucha no termina: por el contrario, recién comienza; pero esta victoria refuerza a todos nuestros compañeros que vivencian en carne propia cuál es la alternativa para que nuestras reivindicaciones se otor­guen. Comenzaremos con una gran campaña de agitación, toda la comunidad de Capitán Bermúdez sa­brá de nuestro trabajo y nuestro cen­tro, sabrá que ante el abandono de los gobiernos ante la barbarie en que nos han sumergido, los compañeros del Polo Obrero y el Partido Obrero planteamos que existe una salida obrera y socialista.