En el marco de la jornada de colectas de alimentos y útiles lanzada por el Polo Obrero y el movimiento piquetero en más de 100 puntos del país, por la mañana del martes 27 de febrero se colocaron ollas en la Plaza del Tanque frente a la estación de Monte Grande y en la peatonal de Ezeiza, en el conurbano sur de la provincia de Buenos Aires. Afectados por las políticas criminales del gobierno de Milei y Pettovello, miles de personas de ambas localidades se quedan sin comida por el desabastecimiento gubernamental que se arrastra desde el final del gobierno de Massa.

Los compañeros del Polo Obrero buscan la solidaridad de los vecinos para poder llenar las ollas y así alimentar a las familias y a los pibes de los barrios frente a la profunda crisis profundizada por un gobierno que en lugar de ajustar a la casta, como prometió en campaña, quiere pagar la fiesta de los capitalistas con el hambre popular, poniendo en venta el país mientras paga a rajatabla la deuda con el FMI.

Todo esto repercute directamente en las panzas vacías de los pibes a los que Milei quiere usar de excusa para ajustar a los jubilados a los que, según sus propias declaraciones, considera casi “ricos”. Una total hipocresía, porque mientras tanto deja sin comida a los pibes en los barrios, empeorando las condiciones para su educación, y ataca a la educación pública a la que tienen derecho a acceder. Además, en vísperas del comienzo de las clases, los chicos, tampoco tienen los elementos necesarios para ir a la escuela.

Por eso, desde los sindicatos docentes combativos y la Multicolor reclamaron en el acto del 26 la continuidad en la lucha en defensa de la educación pública a la dirección celeste de Ctera, ya que el paro aislado que lanzaron es insuficiente para detener el plan motosierra que viene llevando adelante el gobierno de Milei. Además, reclamaron la necesidad de enfrentar también a la casta de los gobernadores, que usan el ajuste nacional como excusa para hacer el suyo.

Unidad de los trabajadores

No son los intendentes ni los gobernadores los que van a enfrentar esta situación de descomposición social. Sólo pueden revertir esta realidad los trabajadores ocupados y desocupados unidos en la lucha frente a la opresión capitalista que pretende hundir en la miseria a toda la clase trabajadora.

Como vemos en estos días con la cuestión de Chubut, las tensiones entre la casta política de un lado y de otro son tensiones entre quienes pretenden hacer uso de los recursos producidos por los trabajadores en favor de su juego politiquero, pero después terminan arreglando a espaldas del pueblo trabajador. Lejos está de los dirigentes políticos burgueses direccionar esos recursos para mejorar la vida al pueblo trabajador argentino.

Por eso la colecta contó con el apoyo de distintos gremios y sindicatos combativos como el Sutna, AGD-UBA y Ademys, entre otros. Ferroviarios de la Lista Gris también estuvieron acompañando y trajeron su colaboración en Monte Grande al gazebo del Polo. En Ezeiza, trabajadores aeronáuticos, docentes, de la salud y muchos compañeros de la Asamblea Vecinal, que adhirió a la medida de lucha del Polo, trajeron también su solidaridad y su colaboración. Los compañeros y compañeras de los comedores populares hicieron una colecta entre los transeúntes y comerciantes de la zona que, solidarizándose, colaboraron con alimentos secos, verduras, ropa y útiles. Al mediodía, la olla ya estaba llena.

El hambre y el desabastecimiento son una realidad concreta de nuestros comedores populares y la unidad del pueblo trabajador es fundamental para dar vuelta esto de una vez por todas. Claramente, la salida es con organización, solidaridad y lucha, visibilizando la realidad que sufren los barrios, todo lo que la casta política de Milei y sus secuaces pretenden tapar para ajustar y seguir enriqueciendo a los mismos de siempre.

Por eso, las ollas que vacían todos los gobiernos y ahora Milei y Pettovello se llenaron con la solidaridad de la clase trabajadora. Así respondió el pueblo trabajador al llamado del movimiento piquetero.