Miles de piqueteros se movilizaron en todo el país, con el reclamo de aumento del salario mínimo y los programas sociales por arriba de la canasta básica de $65.000 y contra las bajas en el plan Potenciar Trabajo. Denuncian que ya habían advertido del “acuerdo” ruinoso firmado en el Consejo del Salario Mínimo, que deja a un millón de programas sociales en la indigencia.

El adelantamiento del pago de las cuotas del “aumento” del salario mínimo, anunciado por el ministro de Trabajo, Claudio Moroni, es parte del encubrimiento de esta política de ajuste, ya que dicha actualización es más que insuficiente para cubrir la inflación del periodo y para recuperar el poder adquisitivo perdido tras años de recorte sobre los ingresos de los trabajadores.

"Estamos en una jornada de lucha para que ningún trabajador reciba un ingreso que este por debajo de la línea de pobreza. Un reclamo elemental y básico que el gobierno que paga al FMI y la deuda no esta dispuesto a cumplir" Jere Cantero, Polo Obrero pic.twitter.com/0RDZNleC9n

— Prensa Obrera (@prensaobrera) July 8, 2021

Los niveles de miseria del salario mínimo impactan en millones de jubilaciones de indigencia, prestaciones sociales y en los ingresos de los programas Potenciar Trabajo, que alcanzan un 50% del valor de dicho salario, promediando los $13.000 por mes, por lo cual se encuentran sometidos a la indigencia absoluta.

Cuando en abril se reunió el Consejo del Salario Mínimo, y entre burócratas sindicales y sociales, las patronales y el gobierno pactaban este ajuste, el movimiento piquetero independiente se movilizó junto al sindicalismo combativo para denunciar esta política de hambre y exigir un salario mínimo por arriba de la canasta básica, en un país donde incluso un cuarto de los trabajadores cobra por debajo de esa línea de pobreza.

"Los planes sociales, los trabajadores precarizados, las trabajadoras de casas particulares, de maestranza, necesitan salarios equivalentes a la canasta familiar y el salario mínimo está en menos de la mitad. Necesitamos que ningún trabajador se muera de hambre" @vaninabiasi pic.twitter.com/oBzw0Nl1R4

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La leve modificación del gobierno ocurre cuando la pauta de inflación oficial pronosticada para el 2021 (29%) es enterrada por la realidad, y cuando se han reabierto las negociaciones paritarias en varios gremios, pasando de aumentos de entre un 30-35% a un 40-45%. Esto, aunque insuficiente, es superior al 35%, en siete cuotas, para el salario mínimo, y no hay adelantamiento de cuota que altere este ajuste, cuando se espera una inflación anual del 50% y la inflación interanual de mayo fue del 48,8%.

"La unidad piquetera se moviliza por un aumento real del salario mínimo vital y móvil y no este manotazo de ahogado que esta haciendo el gobierno de adelantamiento de las magras cuotas al salario" Gaby de la Rosa, Polo Obrero pic.twitter.com/H4sOcHYghu

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Al tiempo que el gobierno aplica esta política hambreadora, las organizaciones piqueteras denuncian que también se ha procedido a la baja de cientos de programas Potenciar Trabajo, que implica la pérdida de los magros ingresos que brinda el Estado para “algunos” desocupados.

La cuestión de la desocupación es un problema que se extiende junto a las medidas de gobierno que habilitan la proliferación de despidos y el cierre de las fábricas: un dato que surge comparando los índices de desocupación sumado a aquellos trabajadores que han abandonado el mercado de trabajo por falta de expectativa de obtener un empleo y que el gobierno no mide en sus estadísticas.

"Nosotras estamos presentes porque nuestro salario esta ligado al salario mínimo vital y móvil, por eso pedimos que se aumente para poder tener un sueldo digno"
María del Carmen, vocera Trabajadoras de Casas Particulares en Lucha pic.twitter.com/KiFh8V7CSJ

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En un comunicado publicado por la Unidad Piquetera, que reúne a más de 40 organizaciones de lucha, afirman que “Hay que abrir fábricas y desarrollar un plan de obras públicas para construir las viviendas y la urbanización de los barrios que necesitamos las y los trabajadores y que permitiría un desarrollo industrial para sacar al país del estancamiento que nos hunde en la pobreza hace decenios”, como salida de fondo a la desocupación y a las necesidades populares. Al tiempo que denuncian que se siguen engrosando las filas de desocupados, ahora con 4.500 trabajadores/as de Garbarino, cuya continuidad laboral se encuentra amenazada.

"Si el salario mínimo va a ser de $29mil como quiere el gobierno, quiere decir que la situación para millones de trabajadores va a ser peor que la pobreza, la indigencia, no va a haber lo elemental para alimentar a sus familias y esto es intolerable" @Solanopo pic.twitter.com/oXXxU5hXiF

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La lucha del movimiento piquetero en las calles demuestra que sigue más vigente que nunca el reclamo por un salario mínimo por arriba de la canasta básica, la universalización del ingreso a los programas sociales, la obra pública y un plan de viviendas para reactivar la industria de la construcción, generar puestos de trabajo y satisfaciendo el derecho a la vivienda de miles de personas. Todas estas reivindicaciones son parte de la lucha política del Frente de Izquierda Unidad y del Partido Obrero.

"Reclaman un salario mínimo vital y móvil que cubra la canasta básica, hoy en $65.000. Tendría que haberse reunido el Consejo del salario mínimo pero el gobierno decidió adelantar un aumento por decreto para evitar la movilización"@nestorpitrola pic.twitter.com/om4mJfygn3

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