El martes 10 y miércoles 11 se desenvolvieron grandes jornadas de lucha en diferentes puntos de la ciudad, las cuales fueron impulsadas por el Polo Obrero, FOL, CTEP, FPDS. El martes se cortó la ruta 22 a la altura de una importante empresa petrolera, Autovía Norte, puentes carreteros que unen Neuquén y Río Negro y avenida Leloir. La jornada del 10 arrancó a las 6:30 con un bloqueo en las puertas de Schlumberger buscando que, a través de esta acción, el gobierno responda. Se coordinó en el corte de la calle Leloir con trabajadores y trabajadoras de la educación que hicieron activa la retención de tareas del gremio Aten. El miércoles, las actividades se concentraron en Autovía Norte y los puentes carreteros.

Los reclamos que motivaron los cortes son elementales. En primer lugar, la demanda de trabajo genuino vinculada a la reactivación de la obra pública, máxime cuando el gobierno de la capital anuncia la creación de loteo, los cuales requieren la puesta en marcha de obras civiles y de servicio. Las organizaciones han solicitado que se las incorporen a ellas. El Polo Obrero lleva adelante esta reivindicación con el programa del trabajo de convenio, respetándose todos los derechos laborales. Luego, es vital el reclamo de aumento de los programas sociales como así su apertura, planteo absolutamente pertinente en momentos que el gobierno elimina el IFE. Por último, la cuestión de la asistencia alimentaria para merenderos y comedores en un cuadro de aumento de la indigencia. Para botón de muestra, las organizaciones suministran más de 4.000 raciones de alimentos por semana y el gobierno asiste con alimentos que alcanzan a 1.500.

Las medidas realizadas fueron contundentes, sin embargo el gobierno no responde. Existe una lucha a fondo, ya que el gobierno de Gutiérrez impulsa un reforzamiento de su política de ajuste el cual se expresa en su proyecto de presupuesto 2021 donde congela salarios, jubilaciones y desmantela la ayuda social. Para el gobierno es clave quebrar esta voluntad de lucha de uno de los sectores mas activo de la provincia. De hecho, la jornada piquetera iba a empalmar con el paro de estatales, algo que la dirección de ATE levantó.

El gobierno neuquino busca el desgaste de las organizaciones y su lucha. Sin embargo, la tenacidad de miles de compañeras demuestra la voluntad a seguir. El cuadro de carestía y bancarrota económica más que nunca nos impulsa a continuar el plan de lucha.