No son las fuerzas del cielo, es la ausencia de urbanización, obras y mantenimiento

Comunicado del Frente de Lucha Piquetero y la Unidad Piquetera frente a las inundaciones.

Inundación en La Plata.

A continuación, reproducimos el comunicado emitido por el Frente de Lucha Piquetero y la Unidad Piquetera al respecto de las inundaciones que azotan al Gran Buenos Aires, como resultado del temporal: 

No son las fuerzas del cielo. Es la ausencia de urbanización, obras y mantenimiento.

La catástrofe que se repitió en las últimas semanas y que amenaza con repetirse en los próximos meses, no solo tiene que ver con el evidente cambio climático, que Milei y su gabinete terraplanista niegan, sino con el desastre urbanístico que son las ciudades y barrios que, además, vienen sufriendo una enorme desinversión de parte del Estado, gobierno tras gobierno.

El ajuste que se viene aplicando a la inversión en obras públicas centrales y la ausencia de planes de viviendas, obliga a que las familias armen su propio plan de “urbanización”, creando un caos urbanístico que además sufre la especulación inmobiliaria sin control. Para lo que no hay servicios suficientes y barrios enteros que no tienen ninguna recolección de residuos. También por la baja de los presupuestos, se ha llegado al colapso total por la paralización de la poca obra pública que existía, que, al verse abandonadas, van creando terraplenes, que impiden la circulación y escurrimiento del agua.

Por otro lado, la eliminación total del programa Potenciar Trabajo sacó a más de 800.000 trabajadores y trabajadores de la limpieza de sumideros, cordones, cunetas, limpieza de plazas, recolección de ramas y corte pasto de las banquinas y pastizales de los barrios más pobres, que son los más inundados y afectados.

Hace tres meses el Gobierno “liberó” de las tareas que realizaban en forma precarizada, casi sin derechos y reemplazando trabajos municipales y estatales a cientos de miles de trabajadores y trabajadoras que realizaban tareas fundamentales de saneamiento de los barrios, donde esos mismos compañeros y compañeras viven y sufren las consecuencias más graves de las “inclemencias del tiempo”.

Ni los municipios, ni las provincias, ni mucho menos la Nación han previsto ninguna medida, ni presupuestaria, ni sanitaria. Sencillamente se sientan a esperar que pare la lluvia. En la anterior tormenta, los compañeros de Pilar se tuvieron que autoevacuar y solo las organizaciones asistieron con un poco de comida a las familias afectadas. La persona de defensa civil que atendía los llamados desesperados de los vecinos, les decía que solo podían llevar a las personas a alguna casa de un familiar (!!!) Un UBER es más útil que esta gente.

La emergencia anunciada por todos los servicios meteorológicos es precisamente una catástrofe anunciada que ni siquiera fue alertada por los gobiernos mediante comunicados o campañas públicas.

 Lo que viene después del agua

Cuando bajen las aguas quedarán la pobreza, la miseria, la pérdida de “capital” o la descapitalización casi total de muchas personas; ya que pierden todo y aún viene lo peor… las enfermedades, que se meten adentro de las casas aguas servidas, materia fecal, y todo tipo de sustancias tóxicas y peligrosas para la salud y sobre todo sobrevuela una enorme amenaza para los barrios más pobres que es el dengue.

El año pasado en abril fue el pico de esta enfermedad que ya se llevó más de 60 vidas en lo que va del 2024 y no hay ni campañas de prevención, ni fumigación, ni mucho menos la vacuna que el canalla del vocero presidencial Adorni considera innecesaria a pesar de la opinión de los médicos especialistas.

Las consecuencias de que los gobiernos año tras año hayan abandonado los barrios populares, reducido los presupuestos en mantenimiento, destruyendo los salarios y desmantelando las estructuras de obras y servicios públicos y ahora con este gobierno, directamente destruyendo y desarticulando lo poco que quedaba de estructura estatal para servicios públicos y saneamiento y hasta de alimentos. Con el cierre de los 45 mil comedores populares que existen en todo el país, con la concepción de que el gasto del Estado debe ser 0 para los pobres y millones de subsidios para los empresarios, para los que sí hay plata.

Ni hablar de que haya alguna previsión de atención de la emergencia con depósitos que hagan reservas de colchones, chapas, alimentos, elementos de limpieza y de protección contra el dengue fumigación etc.

¡Necesitamos respuestas urgentes! La responsabilidad es de los gobiernos municipales, provinciales y nacional!

FRENTE DE LUCHA PIQUETERO.

UNIDAD PIQUETERA.

https://prensaobrera.com/politicas/otra-vez-inundaciones-los-gobiernos-no-ponen-ni-un-peso-para-evitar-los-estragos