“Que se vaya la burocracia sindical”

Traigo el saludo todos los trabajadores del cordón, particularmente de los municipales que anoche terminamos una huelga que había arrancado el 8 de marzo por la efectividad de los compañeros contratados y reclamando un 25% de recomposición del salario, después de 6 días de huelga incesante pudimos traerles una victoria a todos los trabajadores municipales…


Compañeros, creemos que la consigna de esta marcha que es “por Pan, por Trabajo” queda notablemente asentada con los más de 15 y 20 mil compañeros que están en representación de los 15 millones de hambrientos que viven en nuestro país. Y cuando decimos “que se vayan todos” no quiere decir que se vaya solamente Duhalde, también quiere decir que se vayan los Reutemman, que se vayan los De la Sota, que se vayan los Aníbal Ibarra, pero por sobre todas las cosas quiere decir que se vaya la burocracia sindical, que se vaya Moyano, que se vaya Daer, que se vaya De Gennaro… Ellos son los principales responsables de los 36.000 compañeros despedidos en enero, los 75.000 compañeros despedidos en febrero, sin embargo, mientras echan a más de 100.000 compañeros en dos meses, se reúnen con el gobierno para ampliar la concertación, que es la concertación del hambre, que es la concertación de la pobreza, que es la concertación, en el fondo, de dotar de fuerzas a un gobierno declarado por el propio FMI como un gobierno débil, porque el problema en la Argentina ya no es económico, el problema es político, tienen que preparar y juntar fuerzas para reprimir esta insistente y cada vez más grande unidad de los ocupados, de los desocupados, de los pequeños ahorristas, de los asambleístas, que empieza a marcar un camino, y ese camino que va marcando tiene que repotenciarse en el próximo congreso del Bloque Piquetero. Si el 16 de febrero fuimos 2000 delegados, debemos comprometernos a ser 4000 el próximo congreso, esa debe ser la tarea de construcción, construir la unidad, pero la unidad de los que sufrimos, la unidad de los oprimidos, la unidad de los que no tranzan, de los que no quieren concertar, de los que no forman parte de las mesas de consenso social. Para nosotros, el consenso social es transformar las asambleas de cada fábrica, la posibilidad de unir con las asambleas populares, la posibilidad de unir con los desocupados que cortan la ruta, ese es el consenso, esa es la concertación que trabajamos en las fábricas…