Los centenares de familias que se organizan alrededor de los cuatro comedores del Polo Obrero de Quilmes fueron marginadas por la intendencia de la distribución del reforzamiento de la asistencia alimentaria, que correspondía a la partida extraordinaria emitida por el Estado nacional. Tampoco fueron entregados elementos de higiene indispensables en medio de la crisis sanitaria.

La intendencia de Mayra Mendoza margina a las organizaciones independientes priorizando para la entrega de alimentos, no solo a las organizaciones adictas al gobierno sino también al Ejército, que todos los días monta una puesta en escena para repartir 500 platos de comida. Esto cuando el Servicio Alimentario Escolar (que depende del gobierno provincial de Kicillof pero es administrado por el municipio) fue suspendido en la mayoría de las escuelas y fuertemente recortado en calidad y cantidad en el resto de los establecimientos.

En las últimas semanas, a pesar de esto, el Polo Obrero ha entregado centenares de bolsones de mercadería, incluyendo a familias que no forman parte de la organización, ya que el hambre se extiende en los barrios producto de los despidos, las reducciones salariales, la falta de changas.

De no cumplir con los acuerdos ya alcanzados los compañeros del Polo Obrero se verán forzados a movilizar hasta conquistar la asistencia que demandan miles de familias. Reclamamos la duplicación de la entrega de alimentos, un reforzamiento con carnes, pollos, y productos lácteos. A su vez, exigimos un subsidio de $30.000 para los desocupados, un plan de viviendas y de urbanización para terminar con el hacinamiento habitacional y las pésimas condiciones sanitarias de las barriadas.