Tandil se hizo escuchar

Después de algunos cacerolazos de escasa concurrencia, el viernes 25, una multitud se reunió en la ciudad de Tandil. Más de mil personas marcharon por la zona céntrica de la ciudad al ruido de las cacerolas y con las consignas de que “paren de robar” y “que se vayan todos”.


No ha sido fruto de la espontaneidad, hay una organización detrás de esto, aunque no es visible públicamente y se maneja boca a boca. Aquí participan el PO, IU, agrupaciones universitarias (UJS, UNE, MEP y estudiantes de Teatro y Veterinarias), sumados al gremio docente de la universidad que está en la Conadu histórica.


El PO planteó la perspectiva a seguir: transformar el cacerolazo en una Asamblea Popular y votar un programa que incluyera la nacionalización de la banca, el no pago de la deuda externa, el salario mínimo de 600 pesos y, fundamentalmente, la Asamblea Constituyente y, además, le exigimos al Intendente interino que se vaya, ya que no puede resolver los problemas de la ciudad.


Las tareas son muchas. Además, se suman las borradas implícitas de los principales gremios, como es el caso del Suteba, pero es notorio en el cacerolazo la gran cantidad de docentes que participan en él. La situación del gremio metalúrgico es grave y vamos a hablar con algunos delegados para que exijan una huelga que se sume al próximo cacerolazo.