El pasado viernes, en una conferencia de prensa, la ministra Tolosa Paz habló sobre las medidas que llevará adelante su cartera tras los resultados arrojados en las actualizaciones de datos de los beneficiarios del Potenciar Trabajo.

Tolosa declaró: “No hay inclusión laboral si no completamos la formación obligatoria”. Según la encuesta hay 132.043 personas que no completaron el nivel primario y 645.477 que no terminaron la secundaria. El 60% de esa población son mujeres. Más de la mitad tienen entre 18 y 39 años, con hijos a cargo. Mediante un whatsapp que le llega a lxs compañerxs, el gobierno ofrece inscribirse a estudiar de manera no obligatoria.

Reciclaje de medidas estigmatizantes y ajustadoras

Esta política no es una novedad. En el pasado se han lanzado estas medidas de terminalidad educativa. Lo hizo Carolina Stanley bajo el gobierno de Macri. Las personas debían presentarse al colegio (de manera obligatoria) para obtener un certificado y seguir cobrando el plan social.

Lo que hizo el macrismo es continuado por el peronismo. No hay detrás ninguna preocupación por las personas analfabetas o con estudios sin terminar. El interés que está detrás de esto es seguir dando de baja a lxs compañerxs y alejarlos de las organizaciones, principalmente las que salimos a luchar contra el hambre y por trabajo genuino.

Muestran la hilacha

Pero, ¿con quienes sí terminaron sus estudios qué pasa? No hay ninguna política ni pomposos anuncios para los más de 500 mil Potenciar Trabajo que sí finalizaron sus estudios y están capacitados para trabajar. Ocultan que un importante sector de los Potenciar Trabajo está capacitado para ingresar al mercado laboral.

La tregua que pactaron los movimientos sociales oficialistas con el Ministerio de Desarrollo comienza a tener choques, pero aún no pasan de declaraciones en los medios. Sectores de la Utep critican esta medida, la entienden como un recorte del presupuesto, ya que los fondos que el Estado se ahorrará, por las bajas de 100 mil planes caídos por no hacer la actualización, no irán a herramientas, como lo había prometido la ministra a principio de su gestión.

Defendemos el derecho a estudiar

El Polo Obrero y las organizaciones piqueteras siempre defendimos el estudio de lxs compañerxs y su formación. Fue así cuando abrimos centros de terminalidad educativa, apoyo escolar, y durante la pandemia, ante la “brecha digital”, nos movilizamos con el sector más afectado (la juventud) para tener conectividad en comedores y centros barriales, justamente para poder seguir estudiando. Reclamos que no resolvió ningún ministro/a de ningún gobierno.

Es el ajuste

Ocurrió lo que advirtió la Unidad Piquetera en sus jornadas de luchas nacionales. La actualización de datos 100% virtual no era para transparentar, fue la excusa para recortar y continuar una campaña de difamación y persecución a dirigentes piqueteros, como ocurrió recientemente con el compañero “Chiquito” Belliboni, del que la Utep no dijo ni “a”. No es llamativo (lamentablemente), tampoco dicen nada de la condena a prisión efectiva que tienen los compañeros César Arakaki y Daniel Ruiz por haber luchado contra el ataque macrista a los jubilados.

Estas medidas rastreras van a ser combatidas por la Unidad Piquetera, que discutirá un plan de lucha nacional en el próximo plenario en Plaza de Mayo.

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