El domingo 16 de mayo se realizó en el Barrio San Seferino de Nonogasta la asamblea de mujeres hacia el II Congreso Nacional del Plenario de Trabajadoras, con la participación de más de veinte compañeras.Los debates fueron en torno a las diferentes violencias que viven las mujeres en los distritos.

A la violencia psicológica, económica y la discriminación hacia las mujeres migrantes se suma la falta de trabajo y de vivienda. La mayoría de las compañeras se encuentran desocupadas y sostienen su hogar vendiendo verduras o comidas. En épocas de cosecha muchas pierden la AUH ya que son blanqueadas por los patrones por solo tres o cuatro meses sin obra social, ya que para poder acceder a la cobertura deben tener al menos tres meses de antigüedad. A esto se suma que el sistema de salud pública está prácticamente desmantelado, llegando al colmo de que las personas tienen que llevar ellas mismas insumos básicos como jeringas o algodón ya que el centro de salud no cuenta con estos elementos.

Nonogasta es el distrito con mayor población del departamento de Chilecito, ubicado la provincia de La Rioja. Su actual intendente lleva adelante una fuerte política ajustadora al igual que el gobernador Quintela, ambos hombres del PJ riojano que viene gobernando la provincia hace más de 30 años.

Este ajuste impacta fuertemente en los organismos que deberían atender las problemáticas de las mujeres, lo que llevó a un vaciamiento de la oficina y al despido del equipo interdisciplinario de la Secretaria de la Mujer de Chilecito, dejando sin asistencia a mujeres y niños que son los más golpeados por la crisis. Esta situación fue denunciada públicamente por el PdT chileciteño y por otras organizaciones de mujeres.

En la asamblea las compañeras también denunciaron el accionar de Desarrollo Social que asiste “selectivamente” con módulos alimentarios mientras crece el hambre en los barrios, y los planes de mejoramiento de viviendas son manejados de manera punteril, mientras que a numerosas familias se les hace insostenible seguir pagando un alquiler.

También las compañeras plantearon la complicada situación que se vive respecto a la educación, puesto que no pueden pagar el internet por telefonía debido a sus altísimos costos; o bien, la empresa de internet provincial, Internet para Todos, no les coloca el servicio por falta de equipos.

La necesidad de seguir dando pasos en la organización de las mujeres para luchar contra el hambre y los femicidios, fue la conclusión más importante de esta asamblea.