Jocelyn Piedad Escobar Salas falta de su casa de la ciudad de Bahía Blanca desde el día viernes por la tarde. Tiene sólo 14 años y la familia apunta al secuestro extorsivo por parte de un vecino de 28 años.

 

El martes 7 por la tarde, familiares y amigos decidieron convocar a la primera marcha desde el Palacio Municipal en reclamo de la inmediata aparición de Jocelyn. Según los dichos de la mamá de la nena, “la marcha surge a partir de la desesperación de no saber qué hacer, ya que nadie nos da respuestas”. Minutos antes de realizarse la marcha, Severina y Pedro, mamá y papá de Jocelyn, fueron llamados a hacerse presentes en la comisaría que lleva el caso con excusas falsas. Ellos mismos sacaron esa conclusión: “nos llamaron para que no estuviéramos acá (en la marcha) y para que no salgamos en televisión”.

 

La necesidad de organizar una búsqueda nacional e internacional –el supuesto secuestrador es de origen boliviano y podría habérsela llevado allá– es inmediata; de esto, familiares y amigos son muy conscientes, pero chocan contra la pared que impone el Estado, que quiere convencerlos de que “la nena se fue sola” y “es un capricho y ya va volver”. Este bloqueo se romperá en las calles, marchando y reclamando al Estado y sus instituciones burocráticas y cómplices para que se lleve a cabo una exhaustiva búsqueda nacional y Joce pueda volver con sus papás y sus tres hermanos que la están buscando.

 

En las vísperas del paro internacional de mujeres, los asesinatos, secuestros y represión sobre las mujeres no cesan. La realidad muestra una vez más la necesidad imperiosa de organizar una salida de conjunto ante los atropellos, vejámenes, maltrato y opresión que las mujeres sufrimos a diario.

 

Este jueves, a las 19, la familia convoca a una nueva movilización por las calles de la ciudad. Debemos ser miles gritando: ¡aparición de Joce! ¡el Estado es responsable!