Este 20 de septiembre falleció Melani Molina, de 16 años. Sus familiares denuncian que su pareja, Ezequiel Canteros, la mató y encubrió el hecho, haciéndolo pasar por un accidente vial.

Los familiares relatan que la noche de su fallecimiento, Melani salió en motocicleta en dirección a lo de su novio y, como no regresaba a tiempo, fueron a buscarla y se toparon con una pareja que les informa que su hija estaba muerta en la intersección entre la ruta N°7 y N°32. Melani no estaba muerta, por lo que fue derivada al hospital Perrando, donde falleció. El acta de defunción informa de un traumatismo cerebral a causa de un accidente de tránsito. Sin embargo, los familiares cuestionan que sus heridas hayan sido producto de un accidente. Sostienen que la motocicleta está en perfectas condiciones y que Melani tenía golpes en la espalda, en la cara, moretones en los pechos y signos de defensa. A solicitud de la familia se ordenó una autopsia, cuyos resultados estarán dentro de 15 días.

Las sospechas de femicidio hacia Ezequiel Canteros provienen de su trato violento contra Melani, de la que sus compañeras fueron testigos. El encubrimiento provendría del padre de Ezequiel, que tienen vínculos con Mauro Leiva, el Intendente de la localidad. Además, este 28 de septiembre se realizó una marcha y, horas antes, la madre de Melina recibió presiones de la fiscalía para que no realizara el reclamo.

De comprobarse el femicidio, sería el décimo de la provincia y dejaría abierto el interrogante sobre otros casos que no fueron caratulados como femicidio. Desde el Plenario de Trabajadoras exigimos que se investigue imparcialmente la muerte de Melani Molina. Rechazamos las presiones de la fiscalía de no marchar. Basta de encubrimientos. El Estado es Responsable.