Como ocurre desde hace siete años en Córdoba y en todo el país nos preparamos para inundar las calles en una nueva jornada de movilización. La Asamblea #NiUnaMenos- Córdoba ya lanzó la convocatoria para el viernes 3 de junio a las 18 horas desde Colón y Cañada, bajo las consignas “#NiUnaMenos El Estado y los gobiernos son responsables. Basta de femicidios, transfemicidios y travesticidios. ¡Presupuesto ya! ¡El ajuste es violencia! ¡No a la deuda, abajo el acuerdo con el FMI! Destitución de jueces y funcionarios que amparan la violencia machista”.

En lo que va de 2022 se contabilizaron 116 femicidios y tranvesticidios, 158 niños fueron asesinados en femicidios vinculados e ingresan a la justicia más de 60 denuncias al día por violencia sexual. El fracaso de los ministerios de las mujeres y diversidades como política de Estado para erradicar la violencia de género está a la vista, no solo por las alarmantes cifras que se repiten año a año, también porque esos organismos ocupan el centro de los cuestionamientos provenientes de un movimiento de mujeres y diversidades que nunca abandonó la lucha callejera en nuestra provincia.

En Córdoba a seis años de la creación del Polo Integral de la Mujer el dato que redunda es el vaciamiento y la subejecución presupuestaria. Fueron las propias trabajadoras contratadas y monotributistas las que tempranamente rompieron el silencio para dar curso a la lucha por los recursos, el pase a planta permanente, la recomposición salarial y en contra de la precarización y persecución que se vive en estas áreas. En lugar de ser un bastión para la cooptación del movimiento, quedó al desnudo el rol de las funcionarias de Juan Schiaretti, entre ellas la ministra Claudia Martínez, que usurpando nuestra causa han hecho carrerismo político en sendas campañas electorales a costa del avance de los femicidios, la pobreza y el ajuste.

Encubrimiento e impunidad estatal

Este 3 de junio llegará, además, en medio de una provincia azotada por la impunidad. La andanada de escándalos que involucran a funcionarios, fuerzas policiales y la propia justicia no cesa. En diciembre del año pasado en medio de un escándalo fue denunciado por violencia de género Juan Ledesma, el titular del COE (Centro de Operaciones de Emergencia). A los pocos días fue detenido el exdirector de Defensa Civil de la provincia, Diego Concha, por golpear y amenazar con arma de fuego a su expareja y por violar a la bombera voluntaria Luana Ludueña, quien luego se quitó la vida ante el acoso que sufría para que retirara la denuncia. A esto se suma el reciente pedido de la justicia de cotejar el ADN de Diego Concha con material genético hallado en el cuerpo de Andrea Castaña, víctima de femicidio en el cerro La Cruz en Villa Carlos Paz en marzo de 2015.

Asimismo, el juicio por el femicidio de Cecilia Basaldúa que involucra agentes policiales vinculados a una red delictual en la zona de Punilla mantiene en vilo a la provincia. Las pruebas vertidas por la querella y la gran movilización generada están develando el armado de encubrimiento montado por el poder político y la justicia.

En este cuadro de encubrimiento e impunidad estatal también se ubican los casos de abuso sexual en las infancias y adolescencias que vienen cobrando centralidad en la provincia. La condena a Flavia Saganías, la impunidad de los abusos en Collegium, el jardín municipal Juan Gaviota y La Casita del Hornero, entre otros que resuenan en cada asamblea y movilización, dieron inicio a la coordinación de madres protectoras en la lucha independiente contra el falso SAP (Síndrome de Alienación Parental), utilizado por la Justicia para desacreditar las denuncias y efectuar revinculaciones forzosas con violentos y abusadores, así como para el encubrimiento del negocio de la pornografía infantil. Y frente al rol de la Senaf (Secretaría de Niñez, Adolescencia y Familia) a la hora de perseguir y quitarle los niños a madres pobres.

La descomposición reinante hace cada vez más ostensible que la violencia hacia mujeres e infancias es intrínseca a este régimen en declinación. El reclamo de #NiUnaMenos amerita dar un salto en la organización independiente del Estado. Nuestro planteo de un Consejo Autónomo, electo y revocable, y la elección directa de jueces y fiscales, marca un horizonte programático y estratégico en ese sentido.

El ajuste es violencia 

El movimiento de mujeres y diversidades cordobés ha salido al cruce del pacto del gobierno y la derecha con el FMI, así se ha expresado de manera multitudinaria en las consignas del 8 de marzo y en la adhesión a la marcha federal piquetera por el salario, el trabajo, contra el hambre y la pobreza. No podía ser de otra manera cuando somos las mujeres las que nutrimos los índices de desempleo, precarización laboral y pobreza. La jornada del 3J será la continuidad de esos enormes acontecimientos políticos, porque la lucha contra la violencia está íntimamente ligada a la resistencia al ajuste de todo el pueblo argentino.

Este viernes 27 vamos a una asamblea provincial de mujeres y diversidades convocada por el Plenario de Trabajadoras, preparativa de una gran movilización contra la violencia, el ajuste y la pobreza, contra el pacto del gobierno con FMI y por todos nuestros reclamos.

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