Cristian Bazán, concejal de Caleta Olivia, fue destituido hace unos meses por una denuncia de violencia de género realizada por testigos que declararon ver cómo golpeaba salvajemente a su pareja dentro de su local comercial.

Bazán llega como parte de un sublema de Cambiemos encabezado por Gerardo Terraz, quien antes de asumir su banca fue nombrado Secretario de Minería de la provincia, colocándose como funcionario del Frente para Todos. Una cooptación al estilo de los partidos tradicionales. Después de que salieran en los medios las testigos denunciantes, surgió públicamente otra denuncia de su ex pareja de agosto del año pasado, es decir en plena campaña electoral.

La concejal Paola Alvarez del FpT -quien se autodenominó defensora de cada mujer que sufre violencia por haber solicitado la separación del cargo del denunciado-, ha decidido seguir una vía que legalmente no tiene mucho sustento antes que reclamarle a su funcionario de minería que exija la renuncia del espacio político del que decía seguir siendo parte localmente.

Después de meses de controversia mediática, Bazán fue restituido el día 26 de noviembre con el voto de desempate del presidente del concejo, Troncoso, del FpT. En definitiva, este caso muestra de cuerpo entero la política general del FpT, como lo es la cooptación por un lado y su intervención en el movimiento de la mujer por otro, donde la demagogia mediática se distancia de la realidad que requiere de una lucha a fondo contra un régimen y un gobierno que, en su orientación política, sigue cumpliendo la función de reproducir la violencia.

Reclamamos la renuncia de Bazán y la resolución de sus causas por violencia de género. Basta de archivarlas.

 

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