El brutal femicidio de Brenda Micaela ha convulsionado a la sociedad catamarqueña que ha marchado de manera multitudinaria en la Capital y en Andalgalá exigiendo justicia.

La marcha del lunes 2, convocada por familiares y amigos, fue tomada por todo el movimiento de mujeres en su convocatoria. La enorme movilización es producto de la sensibilidad generada por las marchas del #NiUnaMenos, que ya hace cinco años exigen acabar con los femicidios y denunciando como primer responsable al Estado.

El Estado hipócrita

Después que el caso tomara relevancia nacional, desde distintos organismos estatales se han echo eco. En el caso del Concejo Deliberante de la Capital han suspendido las sesiones por duelo y el intendente de la Capital ha declarado duelo en las dependencias municipales, asimismo hubo declaraciones de la exgobernadora, y hoy diputada nacional, Lucia Corpacci. En todo este caso primó las condolencias a la familia y el pedido de justicia, con esto intentan soslayar que son los que nos gobiernan los que no han dado ni un paso para que la violencia cese.

Las comisarías siguen sin tomar las denuncias, la justicia es lentísima en condenar a los violentos y las condenas, como también las perimetrales, no se cumplen. No se han generado refugios para contener a las víctimas y se sigue con presupuesto mínimo destinado a estas tareas. Es notable que el Estado miró para otro lado y hoy se golpean el pecho.

Esta situación es fácilmente contrastada con los subsidios millonarios puestos en manos de la iglesia católica en la provincia. Si estos recursos se aplicarán a las contenciones de las víctimas de violencia, estos casos disminuirían notablemente.

No podemos soslayar que mientras que no se aplique la educación sexual en las escuelas será difícil terminar con el germen de la violencia. El dictado de la educación sexual integral como derecho está bloqueado, como otros derechos, por el lobby de las iglesias.

#NiUnaMenos

La colosal marcha que se desarrolló en Catamarca ha puesto en el tapete el pedido de justicia por Micaela al mismo tiempo que evidencia la responsabilidad que tiene el Estado en todo esto, coloca el problema de los presupuestos destinados a combatir la violencia en la discusión, queremos combatir la violencia y no pagar la deuda. Y por último entendemos que sin medidas de fondo no podremos parar todo esto y para ello tienen que desaparecer los vínculos de la Iglesia del Estado.

El camino que tenemos para la jornada del 8 y 9 M está marcado por el grito de #NiUnaMenos Vivas y Libres nos Queremos por la lucha para conquistar todos los reclamos.

#JusticiaporMicaela. #VivasyLibresnosQueremos. #NiUnaMenos. #ElEstadoEsResponsable