En la tarde de este miércoles 15, se encontró el cuerpo de Priscila Alejandra Martínez en un barrio de la ciudad de La Banda, Santiago Del Estero. La vivienda pertenece al femicida, su tío, Rubén Oscar Ávila; el mismo ya se encontraba detenido por otro ataque contra una joven a la que había violado y agredido el día 9 de marzo. Ávila es un verdadero criminal que contaba con una identidad falsa y en su último ataque contó con cómplices para llevarlo a delante.

El Estado es responsable

Priscila se encontraba desaparecida desde el 23 de febrero, al día siguiente la mamá intentó realizar la denuncia, pero la policía se negaba a tomarle señalando que “seguro se habría ido con su novio”. La reacción de la policía fue de complicidad con el femicida, perdiendo un tiempo valioso que podría haber evitado el ataque posterior. Desde entonces se realizaron campañas exigiendo la aparición con vida de Priscila, lo que dio lugar a una movilización el día 16 de marzo a la Fiscalía a cargo del fiscal Herrera. El reclamo era claro: que se buscara a la adolecente en la vivienda del tío, lugar donde finalmente encontraron el cuerpo de Priscila. Desde el primer momento Priscila fue ignorada por el Estado, permitiendo el desenlace fatal.

En lo que va de la cuarentena van 25 femicidios, tres en el mismo día: Camila Tarocco, Priscila Martínez y el de Jesica Minaglia en Santa Cruz. Esto demuestra el agravamiento de la vida de las mujeres en situación de violencia de género en este aislamiento obligatorio donde tienen que convivir con el violento bajo el mismo techo, por lo cual venimos reclamando desde el movimiento de mujeres desde del primer día de cuarentena. Necesitamos que se pongan en marcha todos los organismos estatales para detener esta ola de femicidios y que se brinde la asistencia a las víctimas.

Exigimos justicia para Priscila Martínez y todas las víctimas.

#NiUnaMenosEnCuarentena

#ElEstadoEsResponsable