Un contingente de destacadas luchadoras de Córdoba participó del XXXII Encuentro Nacional de Mujeres en Chaco. Entre ellas, una representación de trolebuseras, trabajadoras de la docencia y de salud,  de la juventud y las aguerridas compañeras del Polo Obrero de una decena de barrios de la provincia. Nuestra delegación asistió principalmente a los talleres de aborto, violencia, trata de mujeres, sindicatos, educación,  y organizaciones barriales.  

 

En los talleres de aborto las compañeras de juventud desarrollaron una fuerte denuncia a los gobiernos que niegan el aborto legal y respaldan la injerencia de la Iglesia en la educación y en la salud, como contraparte de su rol de contención social en un escenario de crisis y ajuste. Denunciaron la criminalización de mujeres pobres por abortos clandestinos, el  recorte y cierre de programas de salud reproductiva, y  la pretensión de una “Ley de libertad religiosa” para bloquear definitivamente la educación sexual laica en las escuelas. También polemizaron con las kirchneristas, que esgrimieron la ley de educación sexual integral cuando en realidad la ofrendaron a la Iglesia, que cajonearon sistemáticamente el proyecto de aborto legal y le concedieron la reforma reaccionaria del Código Civil como prueba máxima de su fidelidad.

 

Las trolebuseras en los talleres de mujeres y sindicatos contaron su lucha contra el vaciamiento de la empresa municipal de transporte Tamse-Trolebuses y  contra los 64 despidos misóginos y aleccionadores del gobierno radical de Ramón Mestre. Desnudaron el rol no solo de la UTA sino también del resto de las burocracias sindicales, que pese a existir las condiciones rechazaron convocar al paro provincial. Asimismo las docentes y trabajadoras de la salud rechazaron el Plan Maestro y la reforma laboral, denunciando la tregua pactada por las centrales obreras.

 

Las compañeras de los barrios en los talleres de trata pusieron el acento en la necesidad de organizarse con la movilización, como lo hicieron en Córdoba ante las desapariciones de Mayra Cuello, Milagros Romano y Antonela Chiatti, logrando su aparición. También reclamaron un protocolo de búsqueda inmediata, algo que los gobiernos se niegan  aprobar en tanto son cómplices de las redes de trata que operan impunemente. En los talleres de violencia, las compañeras pusieron en evidencia que los partidos del régimen hablan de paridad de género mientras aumentan los femicidios, mientras el gobierno nacional y los gobiernos provinciales destinan migajas al presupuesto y niegan la emergencia y asistencia integral a las víctimas.  

 

En los talleres de organizaciones barriales las compañeras dieron cátedra de cómo mediante la ocupación se consiguen las tierras para los trabajadores y no para los especuladores. Asimismo, exigieron trabajo genuino en contraposición a los planes sociales y la economía popular que impulsa el triunvirato piquetero para institucionalizar la miseria mediante el pacto de tregua.      

 

En definitiva, se trató de una delegación representativa de las principales batallas de la provincia. Sin dudas,  nuestras candidatas del Partido Obrero en el FIT se han colocado a la cabeza de transformar el encuentro en una  herramienta de organización y lucha del movimiento de mujeres que  grita “NiUnaMenos- El Estado es Responsable”, trazando un programa de salida a la opresión y la violencia. El próximo 25 de noviembre en el día contra la violencia hacia las mujeres, volveremos a copar las calles; pero antes, el 22 de octubre llamamos a votar al Frente al Izquierda, como la única expresión política de todas las luchas de la mujer trabajadora.