Iara Rueda de 16 años desapareció el 23 cuando salió a andar en bicicleta y no volvió más a su casa y Gabriela Cruz desapareció el 24/9 cuando fue a hacer unas compras. En ambos casos, las familias denuncian inacción de la policía, la búsqueda la realizaron ellos mismos junto a amigos.

Finalmente y por presión de los familiares de Iara y Gabriela se realizó un rastrillaje a 5 días de la desaparición de las chicas,  en unos  terrenos descampados. Alrededor de las 11 de la mañana se halló un cuerpo semi enterrado de una mujer, luego se confirmó que se trata del cuerpo de Iara Rueda, la indignación de la familia fue cubierta en vivo por los medios de comunicación, quienes reclamaban por la tardanza en la búsqueda.

Inmediatamente los vecinos empezaron a convocar a una marcha con la consigna Ni Una Menos para la tarde en la ruta 66 camino a San Salvador y en el centro del pueblo, pidiendo justicia por Iara y que encuentren a Gabriela. Las movilizaciones fueron una verdadera pueblada, duraron más de 5 horas y culminaron con una represión cuando la marcha llego hasta la brigada de investigaciones.

Se registraron heridos con balas de goma, uno de ellos un periodista que estaba cubriendo la marcha.  La respuesta de Morales fue la represión mientras no brindaron aun ningún tipo de novedad de la búsqueda de Gabriela ni ninguna hipótesis de lo sucedió con Iara.

Un sereno que trabaja frente a los terrenos baldíos, donde se halló el cuerpo de Iara declaro que hace unos días vio una chica corriendo y que era perseguida por un auto, el hombre aviso a la policía y lo mismo tardó días en rastrillar.

Otra pista a investigar es que las cámaras de monitoreo de Palpalá y otras localidades registraron un auto blanco que frenó bruscamente sobre dos adolescentes, quienes salieron huyendo del lugar. Hasta el momento no se avanza en saber si trata de un hecho vinculado a la desaparición de las dos chicas de Palpalá o no.

Mientras tanto crece el temor de las familias al no saber si se está ante desapariciones por trata de personas. La muchedumbre frente a la brigada de investigaciones gritaba, “la policía esta prendida” por la insistente afirmación de la fuerza, de que se tratan de fugas de hogar o ausencias voluntarias.

El pueblo de Palpalá tiene todo el derecho a desconfiar de alguna componenda corrupta de la policía, en el caso de Romina Aramayo, desaparecida y asesinada por una red de trata que operaba en San Salvador de Jujuy, uno de los involucrados es el policía Osvaldo Gabriel Zapana, y no es cualquier policía. En el momento del crimen de Romina era el director de la División de Leyes Especiales de la Dirección General de Investigaciones y luego pasó a ser el responsable de la División de Homicidios de la Brigada.

La policía involucrada hasta los tuétanos en los prostíbulos de Alto Comedero que se llevó la vida de Romina y que aun buscan desviar la causa para que quede impune.

Exigimos justicia para Iara y la aparición con vida de Gabriela. Repudiamos la represión de Morales  al pueblo de Palpalá, que se movilizó masivamente por justicia para sus mujeres.

https://prensaobrera.com/politicas/corridas-y-detenciones-en-una-jujuy-sitiada/

https://prensaobrera.com/mujer/femicidios-y-violencia-el-estado-es-responsable/