Mujer

10/5/2007|991

Justicia para Otoño Uriarte

Basta de enkubrimiento

La desaparición de la estudiante secundaria Otoño Uriarte conmocionó al pueblo rionegrino y, principalmente, a la juventud. A lo largo y alto del Valle, la juventud ha venido siendo víctima de terribles atropellos. Desde el triple crimen de Cipolletti, en el que tres chicas fueron salvajemente asesinadas, pasando por el incremento de denuncias de gatillo fácil y atropellos de la policía, hasta llegar a la desaparición de Otoño Uriarte.


Todos estos casos tienen un hilo conductor: la Policía rionegrina. El caso de Otoño hizo reventar una situación que venía registrándose de manera permanente.


Todo el mundo habla de la complicidad de la Policía con la trata de mujeres, de las relaciones entre los prostíbulos y la cúpula policial. El diario Río Negro dio a conocer las escuchas telefónicas en las que la policía anticipa a los dueños de los cabarets de Valle Medio los allanamientos que se realizarían en la zona.


Es una tarea central de la juventud denunciar con nombre y apellido a los responsables de esta situación: en primer lugar, Saiz y Pichetto, ambos kirchneristas y candidatos a gobernador.


Saiz, actual gobernador, ignoró la desaparición de Otoño durante meses. Pichetto quiso montar de forma demagógica una denuncia de la inactividad de Saíz y denunció a la Policía rionegrina. Dijo: “voy a hacer lo que hace Kirchner a nivel nacional”. ¿Va a investigar la desaparición de Otoño como el gobierno nacional investiga la de Julio López?


Los aparatos represivos del Estado son los principales beneficiarios de la impunidad y encubrimiento de los partidos patronales.


La juventud del Valle tiene una tarea fundamental: pelear por el juicio y castigo a los responsables políticos y materiales de la desaparición de Otoño.


La UJS redoblará su denuncia en las calles por medio de radios abiertas, volanteadas y movilizaciones.


• Justicia para Otoño.


• Por el juicio y castigo a los responsables materiales y políticos de su desaparición.


• Disolución del aparato represivo del Estado.