Mujer

13/10/2016|1432

Latinoamérica presente

Luchadoras del Plenario de Mujeres Trabajadoras y del PT de Uruguay, de la Unión de Mujeres Trabajadoras y el POR de Chile y compañeras de Paraguay participaron junto con la delegación argentina del Plenario de Trabajadoras del XXXI Encuentro Nacional de Mujeres en Rosario.


 


Al finalizar los talleres del día sábado, se realizó una reunión para fortalecer una lucha común en estos países en el terreno de la defensa de los derechos de las mujeres. La misma tuvo lugar en un cuadro de ascenso del movimiento de mujeres, que se expresó en las movilizaciones por Ni Una Menos en Argentina, Uruguay y México, la lucha por la legalización del aborto en Chile, el surgimiento de cada vez más organizaciones de mujeres en Paraguay. 


 


La lucha por la legalización del aborto y la separación de la Iglesia del Estado juegan un papel central en estos países. En Chile, por primera vez, se trata la reglamentación de causales admitidas para la interrupción voluntaria del embarazo; en Paraguay hay un cuadro restrictivo muy grande que pesa sobre las mujeres empobrecidas; en Uruguay la despenalización es parcial y continúa la criminalización.


 


La lucha de las mujeres crece en el marco de la agudización de la crisis capitalista y la pretensión de los distintos gobiernos de hacer pasar un duro ajuste contra las trabajadoras y los trabajadores. La miseria generalizada y la descomposición estatal son a su vez el caldo de cultivo para el desarrollo del flagelo de la violencia más cruda contra las mujeres.


 


La reunión abordó el debate estratégico que atraviesa al movimiento de mujeres, entre una perspectiva de colaboración de clases entre las mujeres oprimidas y las mujeres de las clases opresoras; y la independencia política del Estado y sus partidos para luchar junto a los trabajadores contra el régimen capitalista. Bajo la comprensión de que la lucha por la emancipación de las mujeres es indisociable de la lucha por la transformación de las relaciones sociales de explotación que le dan lugar, las mujeres latinoamericanas reunidas en este encuentro reafirmaron la necesidad de una lucha independiente, obrera y socialista.


 


Las resoluciones contemplan reforzar un trabajo común en todos estos países, organizando a las mujeres en la lucha por el socialismo, la publicación de una declaración conjunta hacia el próximo 25 de noviembre, día de lucha contra todas las formas de violencia hacia las mujeres, señalando la responsabilidad del Estado y para preparar un nuevo encuentro que elabore un programa bajo los principios discutidos.