Durante el viaje a Tucumán a propósito del Bicentenario, los diputados del Frente de Izquierda llevamos nuestro apoyo a las principales luchas de la provincia.

Una que no podía faltar, sin duda, era la causa por la libertad para Belén, que avanza y se va transformando en una causa cada vez más popular, sumando adhesiones dentro y fuera del país. Belén fue injustamente condenada a 8 años de prisión acusada de homicidio tras haber sufrido un aborto espontáneo en la guardia del Hospital Avellaneda de Tucumán.

En esta ocasión, volvimos a visitarla en el penal para reiterarle nuestra solidaridad y ponerla al tanto de la campaña. Además, presentamos un amicus curiae (“amigo de la Corte”) ante el máximo tribunal de la justicia tucumana, exigiendo la libertad de Belén y el cierre de la causa.

Adhesiones

Desde nuestra bancada, con el asesoramiento de nuestras abogadas de la Asociación de Profesionales en Lucha (Apel), impulsamos el texto que presentamos ante la justicia tucumana. Reunimos más de 70 firmas de diputados, dirigentes sociales y políticos y personalidades de la cultura.

Entre otros, firmaron Silvia Martínez Cassina y Úrsula Vargues (el director de cine Juan José Campanella también hizo llegar su solidaridad con la lucha de Belén); las Madres de Plaza de Mayo Línea Fundadora Norita Cortiñas, Mirta Baravalle y Elia Espen, referentes del espacio Memoria Verdad y Justicia, integrantes de la Comisión de Familiares de Víctimas de la Impunidad de Tucumán y otros referentes sindicales, diputados y activistas por los derechos de la mujeres e integrantes de la campaña nacional por el derecho al aborto legal, seguro y gratuito. (Ver aquí listado completo de firmas).

Se trata del sexto recurso de solidaridad que se presenta hasta el momento y hay otros más en camino, impulsados por otras organizaciones.

Visita al penal

Tras formalizar la presentación judicial, fuimos por segunda vez a visitara Belén al penal de mujeres de Tucumán, para transmitirle los avances de la gran campaña por su libertad inmediata y la anulación de su condena que desenvuelve el movimiento de mujeres.

Estuvimos acompañadas por una delegación del Plenario de Trabajadoras y por la senadora salteña Gabriela Cerrano. Vimos a Belén fortalecida a medida que el apoyo popular crece. Sus conclusiones acerca de cómo el Estado y sus instituciones violentan a las mujeres que no tienen recursos la han llevado a organizar a sus compañeras del penal por sus reivindicaciones inmediatas -exigir la asistencia de los defensores oficiales, por ejemplo. A principios de junio, Belén y sus compañeras solicitaron hacer una jornada de charlas sobre la violencia de género, pero las autoridades de la cárcel se lo negaron. Está claro que esta lucha se libra tanto dentro como fuera del penal.

Al comentarle sobre el Encuentro Eucarístico que se realizó en Tucumán y del compromiso de Macri ante la Iglesia para mantener clandestino el aborto, Belén se descargó contando su propia experiencia personal, cuando un cura la llevó a la sala de neonatología para darle un sermón cuando todavía se encontraba convaleciente, tratando de recuperarse del violento legrado al que fue sometida. La injerencia de la Iglesia dentro de los hospitales, en los cuales los curas ingresan con la venia del gobierno de Alperovich-Mansur, es brutal.

En la visita también le transmitimos el logro de la destitución de Dindart en la Comisión de Familia, Mujer, Niñez y Adolescencia de la Cámara de Diputados, un enemigo que representa una orientación social y política que anida en las instituciones del Estado y que impedía que esa comisión se pronuncie por su caso. También le informamos a Belén que la legislatura de Mendoza aprobó -a instancias de los legisladores del Partido Obrero- una resolución en apoyo al reclamo de su libertad. La senadora Gaby Cerrano le contó los pormenores del caso de la nena wichí Juana, embarazada producto de una violación, y la gran campaña que se desenvuelve por ella.

Le preguntamos a Belén qué tiene pensado hacer cuando salga. Nos dijo que estudiará trabajo social y que piensa devolver toda la solidaridad y el apoyo de tantas luchadoras comprometiéndose ella misma a militar en la concientización sobre la violencia que se ejerce en los hospitales públicos.

El camino de la organización es lo que fortalece a Belén frente a este ataque contra las mujeres por parte de los gobiernos y la Iglesia.

A continuar con todo la campaña por su libertad, por la separación de la Iglesia del Estado, por el respeto al aborto no punible y la legalización de la interrupción voluntaria del embarazo.