Mujer

20/8/2021

Salta: muere una niña wichi luego de parir y agonizar 12 días

La noticia en su momento se cubrió de un fuerte hermetismo, la niña ingresada en el hospital Perón de Tartagal, fue llevada el 6 de agosto desde la comunidad originaria Pacara en grave estado con el diagnostico de eclampsia, ya en el hospital tuvo convulsiones y se cayó de la camilla. No se sabe si él bebe murió antes o producto del golpe.

Según el gerente del Hospital Perón, Dr. Santiago Payo, la niña falleció por encefalopatía hipóxica severa, e isquemia cerebral difusa, luego de estar 12 días en coma farmacológico.

Según se pudo saber a través de una nota de Página 12, el presidente de la comunidad Enrique Basualdo explico que el paraje es muy alejado con caminos intransitables, la niña no recibió los controles debidos, ya que la posta sanitaria solo cuenta con un enfermero. También dijo que la niña estaba en convivencia con un joven de 16 años, miembro de la misma comunidad. Basualdo aclaro que en su comunidad si quieren que se dicte ESI, que tuvieron un abordaje al respecto, pero antes de la pandemia, luego nada.

Lo cierto es que el hospital de Tartagal cuenta con una sola medica no objetora, dicen que la niña si fue informada sobre su derecho a solicitar la interrupción del embarazo y lo rechazo. Si a los jóvenes y niños no se les brinda información de sus derechos, a una niña de una comunidad originaria, donde además tiene que haber presente un bilingüe, la información adecuada es muy limitada y hasta cuestionable.

Claramente esta pequeña o su familia podían solicitar ILE, ya que toda relación sexual sin conocimientos, es considerada abuso. Lo que sí es absolutamente verificable por la medicina científica es que una niña tiene mayores riesgos de morbilidad ante un embarazo, más aun si es de una comunidad originaria, sin asistencia médica y en la extrema pobreza.

Por otro lado, en los parajes de las comunidades originarias hay una fuerte instalación de las iglesias evangelistas y católica a través de ONGS y fundaciones, que como lo hacía CONIN en su momento, les daban a las mujeres charlas de cómo cuidarse con los días, nada de anticoncepción.

Los embarazos infantiles son moneda corriente y hasta justificados, el propio gobernador Sáenz publico una vez en Twitter que se realizó con éxito un puente aéreo para trasladar desde una comunidad originaria a una parturienta de 14 años, que “gracias a Dios” tuvo mellizos. Mientras tanto nada de ESI laica y científica en las escuelas, ni tampoco el cumplimiento del aborto legal, ya que los médicos se declaran objetores y el estado no hace nada para garantizar que se cumpla con la ley.

El hospital de Tartagal, ya viene de protagonizar un escándalo en el mes de abril, cuando una fiscal inicio una investigación hacia un médico, declarado objetor, por cobrar dinero y favores sexuales a las pacientes a cambio de realizarle un aborto, que ya es legal.

Desde la Dirección Nacional de Salud Sexual y Reproductiva del Ministerio de Salud de la Nación se advirtió al gobierno de Salta de que detectaron demoras de hasta 4 semanas para dar cumplimiento al aborto legal y un 25% de re llamados de mujeres al 0800-222-3444 diciendo que no pudieron acceder en el tiempo estipulado por la ley, 12 semanas. En la ciudad de Salta se dan solo 8 turno en el Hospital Materno Infantil y 40 en 4 centros ¿qué les queda para las mujeres originarias que viven en parajes alejados?

Por otro lado, en las redes sociales siempre se ven mensajes de mujeres preguntando donde conseguir Misoprostol. Con aborto legal, en Salta siguen los abortos clandestinos. La muerte de esta niña nos trae de nuevo la cruda realidad en la que viven las mujeres y niñas de las comunidades originarias, condenadas a maternar en la pobreza extrema, sufren abusos, no hay ningún derecho para ellas, también nos muestra el rol reaccionario de las iglesias, pilar del régimen político que gobierna.

Vamos por la separación de las iglesias del estado, para que todes podamos tener ESI laica y científica, anticonceptivos para no abortar y aborto legal para no morir. ¡NiUnaMenos por falta de derechos! Sáenz es el responsable de la muerte de esta niña.