El jueves 4 de enero la familia de Yoselin Hernández convocó al juzgado Nº2 de la localidad de Río Gallegos, donde interviene el juez Fernando Zanetta. Una multitud colmó las calles pidiendo justicia por el femicidio, que luego se unió al pedido de justicia por Brianna, otra adolescente asesinada el mismo fin de semana, cuya causa tampoco avanzó y los responsables también están liberados.

El pasado 30 de diciembre por la noche, el cuerpo de Yoselin fue hallado en el domicilio en el que vivía con su hija de tan solo 8 años. Emanuel Haro, femicida y expareja de la víctima, había sido denunciado cuatro veces antes y tenía una restricción de acercamiento. Sin embargo, las cámaras de seguridad de un comercio vecino a la vivienda de Yoselin lo muestra saliendo del departamento en horas del mediodía, momento en que la autopsia marca como hora de la muerte.

La Justicia omite que Haro intentó hacer pasar la muerte de Yoselin como un suicidio, por lo que en la causa figura como “muerte dudosa” y solo estuvo detenido un par de horas y fue puesto en libertad por el juez Zanetta horas antes de año nuevo. Yoselin Hernández era víctima de violencia de género y había realizado cuatro denuncias. La única respuesta que recibió de la Justicia fue una orden de restricción que Haro violó sistemáticamente y hasta llegó a herirla con un cuchillo el mes pasado.

La movilización culminó en Casa de Gobierno, donde familiares fueron recibidos por funcionarios del gabinete del nuevo gobernador Claudio Vidal. El compromiso fue comunicar la situación al ministro de Seguridad, Javier Pródromos, para que verifiquen a los oficiales que estaban a cargo el día que liberaron a Haro y al juez a cargo de la causa, Fernando Zanetti. El gobierno se comprometió además a un diálogo fluido con la familia. La tía de Yoselin anunció que la lucha continuará con marchas y acciones en el izamiento dominical. También exigió justicia por Yoselin y por todas las víctimas de femicidio de Santa Cruz que aún no encuentran justicia.

Lamentablemente el caso de Yoselin pone sobre la mesa una vez más la inacción de la Justicia, que expone a las víctimas de violencia de género a una rueda de denuncias y no brinda protección integral alguna sino que otorga garantías de impunidad al violento.

Desde el Plenario de Trabajadoras vamos a enfrentar la violencia de género en las calles, porque la respuesta no puede venir de funcionarios que recortan el presupuesto de políticas de género a la medida del FMI y no implementan políticas concretas para asistir a las víctimas.

Vamos por un Consejo autónomo de las mujeres y LGTBI electo y con cargos revocables, por elección de un fuero judicial único especializado en violencia de género, con jueces y fiscales electos y un plan integral de asistencia a víctimas de violencia: centros integrales de la mujer, acceso al trabajo genuino y vivienda digna.

Justicia por Yoselin, el Estado es responsable.

Basta de violencia de género

Ni una Menos

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