Mujer

26/4/1994|417

Sobre el Encuentro de mujeres de Córdoba

Los días 16 y 17 de abril se realizó en Córdoba el Encuentro provincial de Mujeres, preparatorio al encuentro nacional de Corrientes. Asistimos al mismo con un volante regional del PO “La mujer frente a la Constituyente reaccionaria”.


El encuentro provincial sirvió para confirmar el carácter NO AUTONOMO de este movimiento. Pude constatar que en Córdoba estos Encuentros son apoyados por el gobierno provincial.


1) El transporte estuvo a cargo del Ministerio de Desarrollo Social de la provincia. (El Encuentro se realizó en el complejo San Miguel, Río Ceballos).


2) El CAM (Centro de acción de mujeres) edita unos cuadernillos sobre violencia familiar, los derechos de la mujer trabajadora, etc., que son subvensionados por el mismo ministerio.


3) Un grupo de mujeres insistían en la necesidad de solicitar un subsidio al gobierno para crear “la casa de la mujer”.


Una compañera de Uepc, que había seguido el debate de la mujer en Prensa Obrera, me cuestionó con insistencia el error de nuestra caracterización, al decir que estos Encuentros eran digitados (debate previo al inicio de las actividades). Tras el primer plenario su posición se tornó insostenible, pero insiste que este es un hecho local, y contradictoriamente me aclara que voces como la nuestra (denunciando el carácter digitado y no autónomo de los Encuentros) son muchas en los Encuentros nacionales.


¿Por qué, me pregunto, tantas voces se levantan en el mismo sentido, si no hay motivos? Pero un dato interesante, tampoco en este Encuentro fue mi voz la única que se hizo oir en este sentido. Hubo otras que, aparte, denunciaron el oportunismo del Intendente Martí (UCR) al utilizar el Día de la Mujer como propaganda de su accionar en favor de las mismas, y la ausencia de este movimiento en una jornada de lucha.


La otra presencia notable fue la del Frente Grande. Las coordinadoras y organizadoras más destacadas son, por ejemplo, María Elsa Nou, candidata a constituyente y apoderada del Frente de Córdoba, ex integrante de la junta ejecutiva de Uepc en la lista Celeste de Grahovac e integrante de la lista Blanca de Soledad García en las últimas elecciones del gremio docente. También estuvo presente el Frente Grande a través del CEOPAL, organización de abogados, asistentes sociales, psicólogos, que trabajan con los loteos indexados y las escrituras en las villas (uno de sus abogados es Viqueira, el segundo candidato a constituyente del Frente local).


Lo más interesante de todo fue el rico debate que realizaron las mujeres en estos talleres (a pesar de los ingentes esfuerzos por acallar las voces más combativas por parte de las frentistas). El tema central del mismo en todos los talleres fue el aborto, la eduación sexual, el control de la natalidad y la necesidad de que el Estado sea responsable de estas acciones. Se debatió sobre la necesiad de la derogación de la “ley Resónico” (ley provincial que prohíbe que en los hospitales del Estado se provean anticonceptivos y se realicen ligaduras de trompas). A pesar de las organizadoras, salió la realización de una sentada para pedir la derogación de la ley y presionar a los constituyentes para que se despenalice el aborto con la consigna “anticonceptivos para no abortar, aborto legal para no morir”.


Entros los datos importantes que se vertieron, estaba el hecho de que una mujer muere por día en la Argentina por abortar en malas condiciones sanitarias. En Córdoba, en el Hospital Rawson (hospital que atiende enfermedades infecciosas) hubo una sala completa con mujeres en estado grave por abortar.


En la maternidad provincial el número de madres niñas es también alarmante (en una semana hubo 14). Cuando estas niñas concurren solas, les hacen dar sus niños en adopción o, lo que es peor, se les dice que murieron (¿hay comercio con estos niños?). Estos son los hechos que demuestran la hipocrecía de los que dicen defender la vida, porque como dijo una compañera, la abortiva es la sociedad. Habría que agregar que lo abortivo es el capitalismo, que condena a la mujer trabajadora y a sus hijos a la opresión y a la miseria, y la “obliga” a abortar: por no ver morir de hambre a sus hijos; por no perder el trabajo; por no tener apoyo del Estado y de las patronales para criar en condiciones dignas a sus hijos y que estos no signifiquen una condena para ella, etc. El Frente Grande sostenía en un doble discurso al Pacto de San José de Costa Rica, porque defiende los derechos humanos (intentaban desviar el debate cuando se tocaba el artículo 4).


Los otros puntos que preocupan a las mujeres es el tema de la flexibilazación, y es muy sentido el tema del servicio militar obligatorio, la jubilación privada. Nuestro volante y nuestro programa está en sintonía con las mujeres trabajadoras y sus aspiraciones.